Celestino J. Vinagre
Miércoles, 31 de diciembre 2014, 00:19
Sin San Isidro de Miajadas (una de las fundadoras del grupo), Amalia de Sajonia de Santa Amalia y Campiña Sur de Granja de Torrehermosa, Acorex pierde más del 40% de su facturación normal. Pero no solo pierde dinero con sus anunciadas salidas, sino impulso cooperativo y fortaleza social y económica. Por este motivo, no es de extrañar que en las últimas horas el mensaje que más suena en el caso Acorex desde ámbitos políticos y cooperativos es el de que hay que intentar lograr paz social.
Publicidad
Esto es, recuperar un clima de confianza interna en el proyecto y en sus gestores desaparecido hace más de año y medio. Para ello, la vuelta de las tres grandes cooperativas al seno del grupo cooperativo extremeño se considera imprescindible. Así lo piensa hasta el grupo Dcoop, interesado en absorber Acorex.
Lee el artículo completo en la edición impresa o en Kiosko y Más.
Escoge el plan de suscripción que mejor se adapte a tí.
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.