

Secciones
Servicios
Destacamos
Cristóbal Colón de Carvajal es la cabeza de la rama principal de los descendientes del descubridor de América y como tal ostenta los títulos de ... almirante y adelantado mayor de las Indias, duque de Veragua y marqués de Jamaica. Como su antepasado, es un apasionado del mar, fue capitán de fragata de la Armada, ahora retirado, y durante quince años ejecutivo en una empresa del sector financiero. El próximo martes, día 26, hablará en el Aula HOY en el salón de actos de Cajalmendralejo, sobre el cuarto viaje de Colón.
–En el cuarto viaje de Colón, que usted va a narrar y que tuvo lugar entre 1502 y 1504, su antepasado perdió sus cuatro naves, naufragó con sus hombres en Jamaica y volvió enfermo a España, ¿por qué ha decidido centrarse en este último viaje?
–Porque me encanta y es el más desconocido. La aventura colombina tiene el viaje del éxito grandioso, que es el primero, el descubrimiento con todas las dificultades que conlleva, con los motines, con los marinos que quieren regresar porque temen quedarse sin víveres y sin agua, pero después de todo eso llega el éxito cuando ven la costa de San Salvador. Su cuarto viaje es completamente distinto. Colón busca llegar a Asia, donde no había llegado anteriormente, y le parece que aquello tiene que estar más al oeste de Cuba, y allí busca un paso para llegar a Asia.
–Él nunca supo que había descubierto un continente, ¿no?
–Esa es la opinión que tiene todo el mundo, pero no es así. Él, en su tercer viaje, está convencido que ha descubierto un continente nuevo, que es la tierra grande del sur, él piensa que es un nuevo continente porque ha llegado a la desembocadura del Orinoco. Cree que un río con tal cantidad de caudal de agua no puede estar en una isla, sino en un continente. Precisamente el cuarto viaje es el que le hará dudar, porque él busca un paso que quede entre ese nuevo continente que ha descubierto y las tierras, las islas del Caribe, que hasta entonces tiene descubiertas. Y por ahí tratará de buscar un paso para llegar al sudeste asiático, que es lo que pretende.
–Hace unas semanas se ha estrenado el documental 'Colón ADN. Su verdadero origen', en el que usted ha participado y que muestra una investigación científica realizada por la Universidad de Granada que desvela que los restos mortales de su antepasado están en la Catedral de Sevilla y cuál es el verdadero origen de Colón. ¿Qué cree que aprenderemos con este documental?
–Ese documental ha comparado los tres restos de la familia Colón: los del almirante y su hijo Hernando, que están en la Catedral de Sevilla, y los de Diego, hermano del almirante, y se asegura que los restos de Colón son los que están en la Catedral de Sevilla. El documental ha suscitado muchas críticas por parte de los antropólogos, que se preguntan de dónde ha sacado esos datos el profesor José Antonio Lorente, que tiene que justificar cómo ha dirigido la investigación. Por otro lado, los historiadores también han criticado que en el documental se descarte la posibilidad de que Colón fuese de origen genovés, cuando este origen es la tesis principal que sostienen ellos.
Aula de cultura HOY
Invitado y tema: Cristóbal Colón de Carvajal pronunciará la conferencia 'Entre la historia y la novela. Cuarto viaje de Colón'.
¿Cuándo y dónde? Martes, día 26 de noviembre, a las 19.30 horas en el salón de actos de Cajalmendralejo, en el Paseo de San Francisco.
Entrada: Libre hasta completar aforo.
–Usted que ha estudiado el descubrimiento de América, ¿qué cree que sucedió tras la llegada de su antepasado y los conquistadores españoles? ¿Considera que fue un genocidio como insisten ahora algunos hispanoamericanos, o por el contrario con la llegada de los españoles comenzó una etapa de progreso y fe?
–La acusación de genocidio proviene de gente que muchas veces ni sabe lo que es. La conquista del Nuevo Mundo fue algo completamente diferente y no se puede tachar de genocidio en absoluto. El genocidio es tratar de exterminar a los nativos del lugar de una forma sistemática y los españoles en ningún momento trataron de exterminar a los nativos americanos, sino al revés, intentaron poner orden y paz donde no lo había. Es como la pax romana, donde iban los romanos imponían su paz, sus leyes, su religión y sus costumbres. Y algo semejante fue la paz hispánica que España impone en el Nuevo Mundo y acaba con la antropofagia existente, que es una de las cosas que no se dicen, porque parece que los españoles llegaron a un paraíso terrenal. Existían las luchas tribales, que acababan en antropofagia, y no solo en el caso de los aztecas, sino en otros muchos sitios, en el propio Caribe, como bien conoció Cristóbal Colón. Era un mundo que cambió para bien precisamente gracias a España.
–¿Qué cree que se pretende con este intento de crear enfrentamiento entre los países de Hispanoamérica y España? ¿Desviar la atención de otros problemas reales de esos países?
–Eso es un recurso tradicional por parte de los políticos. ¿Acaso se le puede echar a Cristóbal Colón o a los españoles de hace 500 años la culpa de lo que ocurre ahora en determinados países? No, en absoluto. Además, tengamos en cuenta que la independencia, la emancipación que se llamó de los países de Hispanoamérica, tuvo lugar ya hace más de 200 años. Desde entonces, ellos son los dueños de su destino. Ya no se puede recurrir a que los españoles están allí permanentemente asediándolos y modificando su forma de vida.
–¿Cree que España debe pedir perdón por la conquista como exige el gobierno mexicano?
–No, en absoluto. Yo creo que hay incluso muchos historiadores de los propios países de habla hispana que ya han dado su veredicto al respecto y no hay nada por lo que pedir perdón. Los españoles fuimos allí, dejamos una cultura y un poso cultural muy importante, una cantidad enorme de viviendas, ciudades, caminos, civilización, hospitales, escuelas... Eso es precisamente el legado que dejó España en el Nuevo Mundo. Creo que es bastante importante y no tiene ni tan siquiera comparación con la pequeña cantidad de metales preciosos que nos llevamos de vuelta a casa. Nosotros dejamos muchísimo más. Si valorásemos una cosa con otra, saldrían ganando y con mucho las naciones hispanoamericanas.
–El rey Felipe VI, en el Encuentro de Academias Hispanoamericanas de Historia que se celebró en Trujillo, aseguró que con los países latinoamericanos nos une la historia y lazos muy intensos de afecto y hermandad e invitó a «tratar con franqueza las discrepancias con Iberoamérica». ¿Cree usted que ese es el camino?
–Evidentemente. Esto es una labor didáctica que toca hacer, porque hasta ahora, por parte de los sucesivos gobiernos españoles, siempre hemos agachado la cabeza, hemos dado la callada por respuesta. Pero precisamente el camino es afrontar los problemas y contar la verdad. Porque no tenemos ninguna necesidad de mentir cuando hicimos las cosas lo mejor que pudimos.
–Por último, ¿qué le parece la estrategia 'Extremestiza' que ha puesto en marcha la Junta de Extremadura para afianzar la identidad común entre extremeños e hispanoamericanos?
–Me parece una idea magnífica, porque las gentes de Extremadura tuvieron un papel relevante en lo que fue toda la civilización del Nuevo Mundo que llevaron los españoles. Ellos hicieron un papel inmenso, porque gran parte de los exploradores, creadores de ciudades, fueron precisamente extremeños. Me parece una iniciativa de justicia.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Favoritos de los suscriptores
Recomendaciones de HOY
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.