-U101036765400gkG--575x382@Hoy-Hoy.jpg)
-U101036765400gkG--575x382@Hoy-Hoy.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
NATALIA REIGADAS
Lunes, 5 de junio 2017, 00:56
Tres niños salen de los campos de fútbol de San Roque y cruzan Ricardo Carapeto. Se asoman a la carretera entre dos coches aparcados en la tierra y corren para pasar la calzada en un tramo sin paso de cebra. Poco después una chica joven regresa a su coche desde el gimnasio que hay junto al McDonald's. Camina por la carretera porque los vehículos estacionados no le dejan otra opción. Son escenas que muestran un claro riesgo para los peatones y que se repiten constantemente en el último tramo de Ricardo Carapeto, el más cercano a la rotonda 'del ocho', que carece de acerado e iluminación.
«Y así seguirá hasta que no atropellen a un niño», dice María José Benegas, vecina de San Roque y madre de uno de los menores que acude dos veces por semana a entrenar en las instalaciones deportivas de la zona. «A diario pasan cientos de personas a las pistas, al gimnasio, al McDonald's... Y no ha ocurrido una desgracia porque hemos tenido suerte, pero al final pasará».
Ricardo Carapeto es una avenida particular. Se trata de una de las calles más largas de la ciudad con casi dos kilómetros, pero no toda su extensión es municipal. El tramo más cercano a la carretera de Madrid no se considera una calle, sino una carretera por lo que depende del Estado. De hecho fue el Ministerio de Fomento el que tuvo que realizar la obra se asfaltado el año pasado.
Estar entre dos administraciones ha provocado que, a pesar de abrir tiendas en la zona y contar con mucho movimiento de peatones, siga sin aceras y sin alumbrado.
«Cuando salen de entrenar los pequeños es un peligro. Yo hablé con el Ayuntamiento pidiendo que lo asfaltaran y pusieran alumbrado para evitar algún desastre. Los niños no están seguros al salir del campo y en invierno se llena de charcos. No hay alumbrado suficiente ni acera», se lamenta Rosa María Durán, presidenta de la Asociación de Comerciantes de San Roque. A su vez el Consistorio ha replicado en varias ocasiones que ha trasladado esta petición al Ministerio de Fomento, pero, por el momento, no hay fecha para el arreglo de este tramo.
El problema se agrava
El problema se agrava por momentos porque en cuatro años esta zona ha pasado de ser un tramo relativamente tranquilo a convertirse en una de las áreas con más tráfico y movimiento de peatones de la avenida.
Hasta 2013 solo las pistas deportivas atraían público al último tramo de Ricardo Carapeto. Ese año se creó la nueva zona comercial en la que se instaló el restaurante McDonald's. Poco a poco fue aumentando la afluencia. Esto se incrementó con la llegada del gimnasio y las instalaciones de la Federación Extremeña de Fútbol. Ahora habrá un nuevo foco de atracción porque en unas semanas abrirá un bazar oriental en la parte baja del centro comercial, justo en la avenida.
Los responsables de la nueva tienda además han adquirido un solar frente a su comercio para instalar un aparcamiento de tierra. Este es otro de los problemas de este tramo, apenas hay aparcamiento porque Ricardo Carapeto se estrecha y en esta zona no hay aparcamientos en batería. Solo una pequeña franja de tierra donde los vehículos paran en línea. Esto es un peligro añadido porque no queda espacio para los peatones y se ven obligados a caminar por la calzada.
Esta imagen es muy habitual. Cada día los vecinos van esquivando coches para llegar a la zona de tiendas o las instalaciones deportivas. La presidenta de la Asociación de Comerciantes de San Roque solicita una solución urgente. «Pido, por favor, que se solucione ese problema o algún día nos arrepentiremos por algún desastre y entonces será cuando salgan las prisas por arreglarlo».
Rosa María Durán asegura que, si las instituciones no toman medidas, las tomarán los propios comerciantes. Hasta el año pasado esta zona de Ricardo Carapeto no formaba parte del Centro Comercial Abierto. Este espacio solo se extendía desde el Puente de San Roque hasta la calle Bilbao, pero los comerciantes solicitaron que se ampliase a toda la avenida y conquistaron esta reivindicación. Ahora esperan que todo Ricardo Carapeto esté en las mismas condiciones.
Los vecinos también han reclamado el arreglo de las aceras en muchas ocasiones. Juan Pedro Parra, que vive a solo unos metros, señala que el mayor peligro se da por las noches. «Los coches entran con fuerza desde la rotonda y no hay luz, por lo que está la gente cruzando a oscuras, sin paso de cebra y con los coches corriendo. Eso es un peligro. Algún día veremos un muerto».
Los fines de semana, añade este testigo, es común ver grupos de menores acudiendo a la zona comercial. «Andando por la carretera sin luz», añade.
Sofía Martínez es usuaria del gimnasio cercano. «Aparcar es difícil, pero venir andando tampoco es sencillo porque te pasan los coches rozando. Y corren mucho».
Otra queja generalizada entre los peatones es la suciedad. Los arcenes son de tierra y están llenos de baches que en época de lluvia son charcos de barros. Además se acumulan las basuras y los vecinos aseguran que no limpian regularmente.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones de HOY
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.