Aparece una villa romana en las obras de la carretera del aeropuerto de Badajoz

Los arqueólogos de la Junta han podido hacer una inspección superficial, y hasta el momento han podido identificar muros, derrumbes y suelos de pavimento hidráulico (signinum), que pertenecerían a varias estancias cuya función aún no se ha determinado. También han determinado que las obras no han dañado los restos.

«Los materiales que acompañan estos restos son, además del típico material constructivo de las cubiertas y paredes (tegulas y ladrillos), cerámicas, tanto de tipo común vinculadas al uso cotidiano de cocina y almacenamiento (ollas, orzas, cuencos, dolias), como cerámicas sigillatas de importación y muy superior calidad destinadas a usos más elitistas. Además, han sido localizados restos metálicos indeterminados en funcionalidad y algunos fragmentos de vidrio, informa la consejería.

La zona donde han aparecido estos restos ha sido acotada «para prevenirla de nuevas afecciones», y se ha pedido a la la Consejería de Ifraestructuras que se paralice la obra en ese tramo, que tiene aproximadamente 180 metros. A partir de ahora, allí «se desarrollarán nuevas actualizaciones arqueológicas que tendrán como finalidad conocer la verdadera extensión y entidad de los restos arqueológicos, caracterizarlos tanto cronológica como culturalmente y poder plantear medidas que hagan compatible la construcción de la carretera con la conservación de los restos».