Cáritas San Roque abre el almacén solidario y pide ayuda a Badajoz para comprar

Cáritas lleva tiempo atendiendo a los vecinos de la barriada, pero con este almacén quieren evitar las 'colas del hambre' y dignificar la ayuda. Así, pretenden que los beneficiarios puedan «comprar lo que necesiten cuando lo necesiten y como lo necesiten». De esta manera, también fomentan la autonomía y la responsabilidad.

El proyecto es más amplio e incluye cursos de formación. Está destinado a personas menores de 52 años, con poco tiempo en el paro, con escaso tiempo de ayuda por parte de Cáritas y con hijos en edad escolar. Pretenden ofrecerles una ayuda transitoria para que puedan volver al mundo laboral y mantenerse sin necesidad de recurrir a Cáritas.

En función de los ingresos y del número de miembros de cada familia, estas reciben una serie de puntos. Deben gastar una serie de esos puntos en el almacén social, pero otros se traducen en dinero y se les ingresa en cuenta para comprar verduras, frutas, carnes o pescado. «¿De qué sirve darle garbanzos si no pueden tener carne para guisar un cocido?», se pregunta Rosa Infante, voluntaria de las parroquias.

Con esta fórmula se les da la opción de elegir también qué adquieren para evitar el desperdicio de aquellos productos que no necesiten o no usen.

El almacén abrió sus puertas el martes pasado en el número 12 de la calle Luis de Zúñiga. Quienes estén interesados en echar una mano pueden realizar una donación en la siguiente cuenta bancaria: ES3421001845920200328778. Pertenece a La Caixa.

Los organizadores cuentan con el apoyo del Banco de Alimentos. El objetivo de los voluntarios pasa por tener socios para contar con una ayuda fija y cierta seguridad todos los meses.

Los voluntarios han organizado algunas actividades para captar fondos, como hicieron el domingo 26 de marzo. La Orquesta Barroca ofreció un concierto solidario y una degustación de paella en la parroquia de San Roque en la plaza de Santiago Arolo.

Los voluntarios de las parroquias de San Roque y La Trinidad llevan tiempo preparando este punto de venta. La parroquia de San Roque ayuda a 65 familias, mientras que la Trinidad supera el centenar.

El almacén comienza a andar con una selección de las familias, 16, e irán incrementando ese número conforme se asiente la iniciativa.