«Era increíble el ruido, yo notaba que vibraba la almohada»

Evaristo Fdez. de Vega

Badajoz

Jueves, 10 de junio 2021, 21:09

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El vecino que promovió el procedimiento penal que ahora se ha sustanciado en el juzgado confirma estos días su satisfacción por la condena, aunque lamenta que hayan transcurrido ocho años desde que se presentaron las primeras denuncias.

«Yo presenté más de 50 denuncias contra ese local. Tenía que cerrar a las 3.00 o a las 3.30 de la madrugada pero había veces que funcionaba hasta las 4.30 o las 5.00. En ocasiones había hasta 200 personas dentro, el doble de lo autorizado», afirma el afectado.

Según cuenta, había noches en las que le resultaba imposible conciliar el sueño. «Era increíble, notaba cómo vibraba la almohada, no había forma de dormir. Cuando yo denuncié el patio estaba abierto y allí ponía dos altavoces».

El Café-Bar Kusso, que tenía licencia especial, funcionó bajo la responsabilidad del ahora condenado entre 2013 y 2018. Su clausura coincidió con la finalización del expediente de sanción tramitado por el Ayuntamiento de Badajoz, que le impuso en julio de 2016 una sanción de 100.000 euros, ordenó el precinto del equipo de reproducción musical y prohibió el desarrollo de la actividad musical en el local por dos años. Ese expediente se paralizó al iniciarse el procedimiento penal.

El problema, asegura el afectado por los ruidos, es que el local ha vuelto a abrir de nuevo con otro propietario y los vecinos ya han presentado varias denuncias por ruidos. Por eso pide al Ayuntamiento de Badajoz que sea inflexible con los negocios de hostelería que incumplen las normas y agilice las sanciones para evitar que vuelvan a producirse casos como el que él ha sufrido.