«La música nos permite sacar de nosotros cosas que ni imaginábamos»

Puri Román es psicóloga y vive en Cáceres. Pero este jueves por la tarde viajó a Badajoz para unirse a otros 263 músicos no profesionales que participaron en el ensayo general de El Mesías de Händel, un proyecto pedagógico y musical impulsado por la Fundación La Caixa que unirá en una misma actuación a la Orquesta de Extremadura, el Coro de Cámara de Extremadura y nueve coros no profesionales llegados desde toda la región.

«Para quienes nos gusta la música es una experiencia maravillosa, esto es de lo más bonito que yo he hecho porque nos permite sacar de nosotros mismos cosas que ni imaginábamos que teníamos», confesaba este jueves Puri poco antes de iniciar el desplazamiento a Badajoz junto a los 30 componentes de la coral In Pulso de Cáceres, que está dirigida por Mari Luz Orozco.

Todos ellos regresarán este viernes al Palacio de Congresos de Badajoz para actuar, a partir de las 20.30 horas, en el concierto participativo al que han sido invitados Ad Libitum, la Coral Llerenense, el Coro del Centro Universitario de Mérida, la Coral 'In Pulso', de Cáceres; la Coral Polifónica Municipal 'Julio Terrón', de Malpartida de Plasencia; los Coros Extremeños de Plasencia, el Coro de Cámara ARS Nova, de Plasencia; el Orfeón Ciudad de Plasencia, el Coro Vocalis y el Coro de la Santa Iglesia Catedral Metropolitana de Badajoz. 

La preparación de 'El Mesías' se ha prolongado durante los últimos tres meses. Primero, cada coral se ha familiarizado con esta obra musical de forma individual; más tarde, han participado en ensayos conjuntos bajo la dirección de Javier Corcuera; y ayer, a las órdenes de Francesc Prat, el director elegido por la Fundación La Caixa para liderar esta iniciativa, hicieron un ensayo para limar los últimos detalles.

«Este tipo de conciertos tienen un trabajo brutal. Para mí, lo más importante es que todos los participantes mantengan la ilusión, mi misión es animarlos a que vayan mejorando hasta conseguir que salga lo que nos proponemos», explica Prat.

En el programa de esta noche habrá números en los que solo participe la Orquesta de Extremadura. Números en los que intervendrá la orquesta junto al Coro de Cámara de Extremadura, que compartirá escenario con los músicos; y también habrá números en los que cantarán las nueve corales de forma conjunta para unir sus voces.

También tendrán un especial protagonismo los solistas elegidos: Ruth Rosique, soprano; Xavier Sabata, contratenor; Juan Sancho, tenor, y Enric Martínez-Castignani, bajo. «En este tipo de obras el trabajo inicial es el mismo que cuando se trabaja con una formación profesional, siempre hay que tener el mismo respeto por la música y los artistas», afirmó el director, en cuyo currículum se recoge una importante trayectoria que le ha permitido dirigir, entre otros trabajos, un repertorio operístico de Wagner en el Teatro Real de Madrid.

Con la misma ilusión se plantea el concierto de esta noche Amaya Añúa, directora del Coro de Cámara de Extremadura. «En nuestro caso contamos con muchos profesores de música y de conservatorios. Son personas con una importante formación musical, pero no son personas que se dediquen a cantar. ¡Ya les gustaría poder vivir profesionalmente de esto!».

Añúa confirmó que el nivel de los coros participativos está mejorando por el trabajo que hacen los directores de los coros y también por la labor que desarrollan los preparadores que participan en iniciativas como la de esta noche. «Si a eso le unimos que este tipo de concierto se realiza cada dos años en Extremadura, podremos entender por qué se está consiguiendo un resultado cada vez más positivo».

Los conciertos participativos de La Caixa se habían celebrado con anterioridad en Cáceres y en Mérida, por lo que el de esta noche es el primero que se realiza en Badajoz.

La actuación se prolongará durante dos horas y la intensidad será máxima cuando los 265 músicos no profesionales, que ocuparán las butacas más próximas al escenario, se pongan en pie para interpretar los números conjuntos. «La música nos aporta alegría, comunicación, incluso es capaz de cambiarte el ánimo cuando estás mal. En nuestro caso nos permite disfrutar de algo que nos gusta y olvidarnos de todos los problemas del día a día», concluía Puri Román, una pequeña pieza dentro de un engranaje que espera que El Mesías suene a música celestial.