Quintana anuncia reuniones para buscar soluciones a las infraestructuras

Tiene previsto invitar a esos encuentros a agentes sociales, la asociación que agrupa a los alcaldes (Fempex), la Junta y todo aquel que tenga algo que decir sobre las infraestructuras. «Las puertas –dijo– estarán abiertas».

En esos encuentros buscarán «soluciones a los problemas que vayan surgiendo, pero también para hacer reivindicaciones, pedir cuentas y para hacer propuestas».

José Luis Quintana interpreta que la presencia del ministro de Transportes, Óscar Puente, en su toma de posesión es una «declaración de intenciones» del Gobierno de Pedro Sánchez. Y del impulso que quieren dar a las soluciones que requieren las infraestructuras.

Quintana se marcó ayer varios objetivos para los próximos cuatro años. Entre ellos, mejorar la atención a personas vulnerables (mayores, niños, personas con discapacidad y víctimas de violencia de género). De hecho, pretende pedir ayuda a los municipios para mejorar la implantación del sistema Viogen en la lucha contra los asesinatos machistas.

El delegado se puso otros retos, como recuperar las plazas de empleados públicos que se perdieron con la crisis de 2008 para ofrecer mejores servicios a los ciudadanos y mejorar la administración electrónica. Habló de la «revolución verde» y se comprometió a trabajar contra el cambio climático. También se refirió a logros del Gobierno, como la subida del SMI.Q

«Creo en el trabajo conjunto. Frente al odio, respeto», dijo. Habló «del reto del diálogo social» y aseguró que «ganamos todos con la paz» firmada por sindicatos, administraciones y asociaciones empresariales.

En un salón lleno de autoridades, políticos y compañeros de partido, el exalcalde de Don Benito insistió en tender la mano al resto de administraciones y, en especial, a la Junta de Extremadura. Tuvo palabras para la presidenta extremeña, María Guardiola. Le ofreció «lealtad institucional y colaboración absoluta», a la vez que llamó a aparcar los conflictos que puedan surgir.

Entre los asistentes estaban los tres expresidentes de la Junta de Extremadura. A Ibarra le describió como su padre político. A Monago le agradeció la «clase de lealtad política» que le dio a la hora de pensar en el bien común y en el futuro. Y, sin expresarlo, parte del auditorio entendió que se refería al apoyo al fusión finalmente frustrada entre Don Benito y Villanueva. A Vara le dedicó palabras de cariño y le describió como su «hermano de vida». «Somos iguales en moderación». «Te necesito porque necesito preguntarte muchas cosas», le dijo.

Quintana se acordó de Juan Casado Morcillo, que fue nombrado gobernador civil de Badajoz 87 años antes que él, el mismo día. Ensalzó su figura y aportación y denunció que aún no se han encontrado sus restos. «Es un referente para mí».

Quintana tomó ayer el relevo a Francisco Mendoza, quien vuelve a su puesto de trabajo en la Diputación de Badajoz. Este también tuvo palabras de agradecimiento y se puso a disposición del nuevo delegado.