Desaparición de Pablo Sierra
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Compañeros de estudios, colegas de residencia y amigos se acercaron este viernes al Instituto Anatómico Forense a depositar velas dentro del edificio. Fue una forma espontánea de mostrar su dolor por la pérdida de Pablo Sierra mientras practicaban la autopsia con el objetivo de aclarar el suceso.
El hallazgo de su cuerpo sacudió la ciudad desde minutos después de las diez. Ciudadanos anónimos se acercaron hasta el lugar en el que aún trabajaba la Policía Nacional mientras que la Universidad de Extremadura convocaba a toda la comunidad a guardar un minuto de silencio. Pararon a las doce del mediodía para mostrar su consternación y respeto por la muerte del que fuera su alumno del grado de Matemáticas.
La institución académica convocó a estudiantes y profesores a parar ese minuto antes del mediodía en cuanto se supo del hallazgo del cuerpo.
El rector, Antonio Hidalgo, encabezó la muestra de la consternación a las puertas del rectorado. Aunque había otras concentraciones convocadas en el campus en los accesos a los distintos edificios. La Facultad de Ciencias, a la que pertenecía este estudiante de 21 años nacido en Zorita, la celebró en Química.
Allí se pudo ver a decenas de jóvenes mostrando su estupor por el suceso. La misma facultad publicó fotografías de su edificio central con un crespón negro en señal de luto y el pésame a todos los allegados de su estudiante.
La Universidad colaboró desde el inicio de la investigación pidiendo a los alumnos que comunicaran cualquier dato que pudiera ayudar a encontrar a su compañero.
El otro lugar clave para Pablo en Badajoz era la residencia universitaria de la Fundación CB, la Rucab. Poco después de conocerse el suceso, canceló la charla organizada para ayer en las instalaciones donde Pablo residía. Lo hicieron como muestra de respeto y consternación ante el desenlace de la búsqueda del universitario.
La charla prevista para este viernes estaba a cargo de Odile Rodríguez de la Fuente y había generado cierta expectación. La hija del naturalista iba a presentar el libro 'Félix. Un hombre en la tierra' a las 19 horas. Pero fue anulada.
La Rucab hizo público un comunicado a media tarde para mostrar sus condolencias y el cariño hacia los familiares.
Pablo Sierra, estudiante de Matemáticas, era usuario de esta residencia junto a su hermano mellizo. De hecho, las alertas por su desaparición saltaron cuando un tercer hermano acudió la mañana del viernes día 3 para recogerlos y llevarlos a Zorita, en Cáceres, de donde es oriunda la familia y donde iban a pasar el Puente de la Inmaculada.
Pablo no estaba en su dormitorio, no había signos de que hubiera pasado allí la noche y le buscaron por el resto de dependencias antes de dar la voz de alarma iniciar la investigación fuera de las instalaciones. Comenzaron entonces dos semanas de angustia que terminaron ayer de la peor forma posible.
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