

Secciones
Servicios
Destacamos
La sobrepoblación de jabalíes en el entorno del casco urbano de Cáceres y la bajada del monte en piaras de esta especie salvaje a algunos barrios de la capital, han llevado al Ayuntamiento y a la Consejería de Medio Ambiente a adoptarmedidas más efectivas para su reducción que la ampliación de los cupos de caza de once cotos del área periurbana que «no ha sido suficiente», según ha admitido este viernes la titular de la Consejería, Begoña García Bernal.
El alcalde cacereño, Luis Salaya, y la Consejera, han anunciado una solución nueva tras el encuentro que han mantenido en el Consistorio. Se trata de un programa «científico» que desarrollará la empresa Ingulados, especializada en control poblacional e innovación cinegética.
Dicha empresa será la encargada de diseñar la reducción de población a través de una serie de acciones que ejecutarán la Federación Extremeña de Caza y Tragsa, que se estima que se pongan en marcha la próxima temporada de caza.
«Lo que se haga se va a hacer con criterios científicos», ha declarado García Bernal, al tiempo que ha matizado que la empresa dirá «cómo, cuándo, dónde y de qué manera se tiene que hacer la reducción poblacional, donde hay que poner cercas, donde hay que poner jaulas, donde se pueden hacer las batidas».
Bernal ha explicado que se combinarán acciones cinegéticas con otras para extraer a los ejemplares.
«En las zonas donde esté permitida la caza, junto a la Federación, haremos ganchos, batidas, etcétera, pero en zonas que no esté permitida, a través de cercas y jaulas, lo que vamos a hacer es una extracción de los animales para quitar población», ha precisado.
El número de jabalíes ha aumentado durante el confinamiento a consecuencia de la disminución de la caza, unido, según ha criticado Salaya, a la «malísima» costumbre de dejar la basura fuera de los contenedores.
Esto está provocando que los jabalíes se desplacen del monte a la ciudad en busca de comida, principalmente a barrios periféricos como los residencialesUniversidad y Vistahermosa o algunas zonas de Mejostilla.
Las piaras no han ocasionado ningún accidente grave, según ha aclarado el regidor, pero sí numerosos destrozos en los barrios por los que cruzan estas familias de jabalíes, que a su paso estropean parques y levantan los sistemas de riego para beber.
«Lo más preocupante son los sustos que dan a los vecinos, no ha habido ningún ataque ni nada parecido, pero si es cierto que genera una inquietud en barrios que son generalmente tranquilos y donde incluso por la noche los niños juegan en la calle», ha subrayado el primer edil.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Favoritos de los suscriptores
Recomendaciones de HOY
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.