Sin rastro del camión ucraniano que debía cargar la ayuda en Cáceres
Desaparecido ·
El vehículo que ayer debía recoger en el colegio San Antonio las donaciones de la campaña promovida por Krystina Mykulyak no llegó a por la mercancíaSecciones
Servicios
Destacamos
Desaparecido ·
El vehículo que ayer debía recoger en el colegio San Antonio las donaciones de la campaña promovida por Krystina Mykulyak no llegó a por la mercancíaEn los últimos días la ucraniana residente en Cáceres Krystina Mykulyak ha movido cielo y tierra para enviar a su país las donaciones de ayuda humanitaria recibidas a raíz de la campaña que puso en marcha nada más desatarse el conflicto bélico con Rusia. Cientos de cajas de material sanitario y bienes de primera necesidad, clasificados y organizados por alumnos y profesores del colegio San Antonio, tendrían que haber salido ayer de las instalaciones de este centro con destino a Rivne, la población de Krystina.
A las 16.30 de la tarde estaban citados los voluntarios que se han volcado con la ucraniana, para ayudar a cargar la mercancía que estaba previsto que recogiera un camión con conductor ucraniano, con el que el que el día antes se había concertado la recogida. El vehículo debía estar en el San Antonio a las 15.00 horas, como el propio conductor confirmó por teléfono a su compatriota en Cáceres, pero finalmente no llegó.
Tanto Krystina, como una persona responsable de un centro logístico de su país, a través del cual ha coordinado el envío del material a Ucrania con una empresa de allí, intentaron insistentemente conectar sin éxito con el camionero al ver que éste no se presentaba a la hora fijada.
Pasadas las cinco de la tarde, y preocupada por el temor a una posible desaparición voluntaria del transportista, que poco antes de las tres «me había dicho que en 15 minutos estaba aquí», esta ucraniana de 39 años se derrumbada en presencia de los voluntarios que aguardaban al camión.
«Estoy muy nerviosa, me va a dar un infarto, mi padre estaba encantado con esto, todo el mundo sabe lo que hemos hecho, pero al final mira lo que ha pasado», lamentaba visiblemente alterada y entre sollozos.
No la consolaban las palabras ni los aplausos de las personas que la acompañaban a las puertas del San Antonio, dispuestas todas a arrimar el hombro cuando se resuelva el infortunio y la ayuda pueda salir para Ucrania. «No te preocupes, no es culpa tuya, aquí estaremos cuando nos necesites», le animaban.
Según relató a este diario la mujer, este pasado lunes la persona de contacto en Ucrania le había transmitido la disponibilidad de un camión con conductor en Málaga. De hecho, el primer llamamiento de ayuda para cargar la mercancía humanitaria se hizo por redes sociales ese mismo día para acudir a las diez de la noche, pero el vehículo tampoco llegó. «Ayer (por el lunes) dijo que estaba parado a 140 kilómetros de Cáceres».
Todo el operativo, según su testimonio, estaba acordado con el camionero, del que le habían facilitado su documentación personal junto con los papeles para poder transportar la mercancía y el número del camión. Ella misma mandó al conductor la ubicación del punto de recogida por whatsapp.
Al redactarse esta información a última hora de la tarde, el vehículo seguía sin llegar a Cáceres y Krystina lo daba ya por perdido. «No va a venir. Esto está claro. Me están buscando otro camión. Lo más importante es que todo está en el almacén», decía con algo de alivio.
Mientras, en las dependencias del San Antonio se guardan las cajas que contienen kilos y kilos de alimentos no perecederos; comida, ropa y productos para bebés; y medicinas empaquetadas con un criterio sanitario por madres farmacéuticas de alumnos.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Jon Garay y Gonzalo de las Heras
Equipo de Pantallas, Oskar Belategui, Borja Crespo, Rosa Palo, Iker Cortés | Madrid, Boquerini, Carlos G. Fernández, Mikel Labastida y Leticia Aróstegui
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.