El Ayuntamiento de Cáceres seguirá rechazando la mina aunque traiga una fábrica de la mano

Hay que recordar que el papel del Ayuntamiento es clave para el futuro del proyecto incluso aunque Infinty Lithium consiga los permisos necesarios por parte de la autoridad minera autonómica, ya que actualmente el plan de urbanismo municipal prohíbe de manera expresa la actividad extractiva en la Sierra de la Mosca.

«Damos la bienvenida a cualquier empresa que se quiera instalar en la ciudad, pero eso no cambia nuestra postura ante la mina de Valdeflores». Esta fue ayer la reacción del alcalde, Luis Salaya, quien aclaró además que «tampoco sabemos nada esa fábrica más que lo que se ha publicado en la prensa». Según indicaron el miércoles desde Infinity Lithium, las instituciones que sí están al tanto de las conversaciones son la Junta de Extremadura y el Gobierno de España. Con el Ayuntamiento hace tiempo que no mantiene ningún contacto.

El PP también sigue en contra de la mina. Este jueves emitió un comunicado en el que su portavoz municipal, Rafael Mateos, pidió alcalde que «sea firme con la mina y no le tiemble el pulso para defender el presente y el futuro de Cáceres». Sin hacer referencia a la posibilidad de que pudiera haber una fábrica vinculada a la mina, ni a si eso afectaría o no a la posición que mantienen los populares, Mateos insistió en que «Salaya debe tener claro que el futuro de Cáceres se decide en Cáceres y lo deciden los cacereños, y no en Mérida por intereses partidistas».

Unidas Podemos mantiene que su oposición a la mina no depende de la posible de llegada de ninguna fábrica, ya que eso no altera lo que para ellos es lo esencial: preservar el medio ambiente. «Nuestra postura es la misma porque los perjuicios contaminantes de una mina a cielo abierto para la salud, el aire, el agua o el modelo económico son los mismos con o sin fábrica», apuntó la su portavoz, Consuelo López Balset, quien considera por lo tanto que «el Ayuntamiento debe mantenerse firme en su decisión de no cambiar el PGM y explicar bien a la ciudadanía su postura».

La única nota claramente discordante la puso, una vez más Ciudadanos, cuya portavoz municipal, Raquel Preciados, afirmó que el Consistorio «debería trabajar en hacer viables las inversiones en Cáceres, incluida la fábrica, y abandonar las pancartas y manifestaciones». Sobre el proyecto de la mina, sigue defendiendo «que avance la tramitación y que la empresa cumpla con los informes sectoriales, entre ellos el medioambiental».

El concejal no adscrito Francisco Alcántara, que habla también en nombre de su compañera Mar Díaz y del partido Cáceres Viva, criticó la «insensibilidad» que, a su parecer, muestra Infinity Lithium con los cacereños. «Ahora que ven peligrar su proyecto lo tratan de solucionar cuando deberían haber empezado por eso», señaló en referencia a las negociaciones para traer una fábrica de cátodos. Alcántara asegura que luchar por acompañar la mina de un proyecto industrial importante «fue lo primero que desde Cáceres Viva se les sugirió. «Ahora que aprecian las dificultades quieren subsanar el error», dijo, en lo que considera «una prueba más ser una empresa especuladora».

Para el también no adscrito Teófilo Amores las cosas están claras: «La destrucción de la Sierra de la Mosca sería la misma aunque pusieran también una fábrica, así que me sigo oponiendo a la mina».