Suceso en Extremadura

El conductor que se llevó a un hombre sobre el capó en Cáceres se niega a prestar declaración

El conductor residente en Arroyo de la Luz que el pasado lunes huyó tras circular varios centenares de metros a gran velocidad con un hombre sobre el capó del coche en la avenida de las Arenas, junto a Carrefour, ha acudido de nuevo este jueves a la jefatura de la Policía Local de Cáceres acompañado de un abogado, pero se ha acogido a su derecho a no declarar.

El conductor ya se había personado por voluntad propia en la jefatura el día siguiente del suceso, pero entonces no se le pidió que prestara declaración, sino que quedó la espera de ser citado. Finalmente le se emplazó para el jueves por la mañana, pero se ha negado a prestar su testimonio sobre lo ocurrido.

Según informa el Ayuntamiento cacereño, continúan mientras tanto las diligencias del atestado por parte de la Policía Local, que una vez finalizadas serán remitidas al juzgado y a la fiscalía.

La Policía Local había pedido el mismo lunes la colaboración ciudadana para identificar al conductor del coche tras difundirse un vídeo en el que se veía cómo circulaba unos 200 metros con un hombre encima del capó, poniendo en peligro la vida de este último.

Según el relato hecho a HOY por Juan Iglesias, el hombre al que se llevó el coche sobre el capó, todo comenzó en la glorieta de acceso al Junquillo, cuando el otro vehículo y el suyo se dieron un golpe. Juan Iglesias le siguió hasta la rotonda de Carrefour, donde aprovechando que estaba el semáforo en rojo bajó y se puso de pie frente al otro vehículo para pedir explicaciones al conductor. Fue entonces cuando este arrancó y se llevó a Juan sobre el capó durante casi 200. Pudo bajarse al parar el coche en la glorieta del Junquillo, aunque sufrió algunos golpes y magulladuras. El vehículo que se lo había llevado encima se dio a la fuga.

Según la descripción de Juan Iglesias, el conductor del Peugeot de color negro que se negó a atender sus requerimientos tras el accidente, tenía unos 70 años y viajaba acompañado por una mujer.

El conductor se expone a ser condenado, entre otros, por un delito contra la seguridad vial por una temeridad manifiesta y poniendo en peligro la integridad de las personas. Se castiga de seis meses a dos años de prisión aunque si se estima que hubo desprecio manifiesto por la vida de los demás, la pena de cárcel aumenta hasta cinco años, además de multa y privación del derecho a conducir.

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