Construcciones ilegales que salen caras

A una de ellas se le ha impuesto una sanción de 50.000 euros, la cuantía máxima, porque incumplió la orden de paralización de las obras y se aplica un agravante. No obstante, la cifra se reduce a la mitad si se restaura y devuelve el paisaje alterado a su estado original.

En este caso se trata de una vivienda de unos 90 metros cuadrados que se estaba construyendo en una parcela del paraje Ramongil, en el entorno de los Llanos de Cáceres. Carecía de autorización municipal y el suelo, según el planeamiento vigente, prohíbe el uso residencial.

El Ayuntamiento inició el expediente de restauración urbanística en agosto de 2020 y ha pasado por la Comisión de Desarrollo Urbano esta semana para ser refrendado en el próximo pleno. Su titular, José Ramón Bello, hacía hincapié en el «compromiso» del equipo de Gobierno con el cumplimiento de las leyes, «salvaguardando –resaltaba– aquellas zonas que están protegidas en el Plan General Municipal».

La otra edificación sancionada se ubica en una parcela de El Collado, donde los agentes del Seprona de la Guardia Civil descubrieron en agosto del año pasado gran cantidad de material de obra, corrimientos de tierra y el inicio de una construcción en ladrillo de unos 150 metros cuadrados. Tras la correspondiente denuncia, el acta se remitió al Ayuntamiento.

Urbanismo declaró igualmente la infracción urbanística como grave, imponiendo a la titular del terreno una multa de 28.000 euros y la obligación de demoler las obras realizadas ilegalmente.

No son las primeras sanciones que se interponen. El Seprona vigila obras de viviendas sin permiso que suelen destinarse a segundas residencias. Desde 2015 a 2019 denunció 327 en la provincia de Cáceres.

Hay casos en los que las construcciones ilegales han llegado a los tribunales, con sentencias incluso de cárcel. Como una del Juzgado de lo Penal de Plasencia que condenó a un padre y sus tres hijos a un año y dos meses de prisión como autores de un delito contra la ordenación del territorio, en su modalidad de promotores y constructores, de obras no legalizables en suelo no urbanizable, por edificaciones que realizaron en una finca rústica de la localidad de Valdastillas.

En el término municipal de Cáceres, en la zona de uso limitado ZIR están autorizadas solo las nuevas construcciones vinculadas a explotaciones agrícolas o ganaderas que tienen una superficie mínima de 50 hectáreas. El tamaño de las parcelas se eleva a las 100 hectáreas para las viviendas que no están ligadas a dichas a explotaciones.