Decretan secreto de sumario sobre la muerte violenta de un hombre en Moraleja

El juez del caso del hombre muerto de manera violenta en la madrugada de este domingo en Moraleja ha decretado secreto de sumario sobre la investigación. Ni en Moraleja, en donde se produjeron los hechos a la altura de la esquina de la calle Luis Chamizo con Cardenal Cisneros (barriada de Casas Baratas), ni en Acebo, el pueblo natal del fallecido, de 56 años, conocen (o cuentan) demasiados detalles sobre un suceso que ha agitado ambas localidades y sobre el que se ciernen más dudas que certezas. «Estamos todavía que no nos lo creemos», señala el dueño de un bar de Acebo (582 habitantes) que no quiere dar ningún detalle sobre los hechos.

Igual sucede en otro local de hostelería de Moraleja (6.500 habitantes), en donde esta mañana contaban que, al llegar temprano a su churrería, la Guardia Civil les había pedido la documentación, y que el revuelo era considerable. «Pero no he vuelto a saber más en todo el día, yo he terminado y me he ido a mi casa».

Hacia las 5.20 de la mañana el Centro de Atención de Urgencias y Emergencias recibía una llamada en la que se alertaba que había una persona fallecida en un descampado del municipio, explicaba la Guardia Civil en un comunicado sin aportar más detalles. Fue la Policía Local de esta población la que se ocupó en primera estancia de este sucesos. Hacia el mediodía se señalaba que el suceso presentaba indicios de criminalidad y se decretaba el secreto de sumario. Mientras, el cuerpo del fallecido ya había sido trasladado al Instituto de Medicina Legal de la capital cacereña para practicarle la autopsia.

La Guardia Civil no aclara los motivos de la muerte de este hombre, ni se confirma el uso de arma blanca o de fuego, ni tampoco si hay personas detenidas por estos hechos que se encuentran en plena investigación. El alcalde de Moraleja, César Herrero Campos, indicó que tras retirar el cadáver los servicios de limpieza habían tenido que acudir para retirar manchas de sangre.

Fue Julián Puerto, el alcalde de Acebo, el que indicó que el fallecido se dedicaba a la agricultura además de otros trabajos temporales y que estaba casado y era padre de dos hijos. Hacia el mediodía las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado informaban a su mujer de los hechos. La rumorología ha invadido los grupos de Whatsapp de las poblaciones, en las que se habla «de un ajuste de cuentas», supuestos que no confirma la Guardia Civil.

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