El defensor del parricida de El Perú pedirá su absolución porque «estaba muy borracho»

«Cuando disparó a su padre tenía una intoxicación alcohólica plena. Llevaba todo el día bebiendo y no sabía lo que hacía», afirma a este diario Diego Pacheco, abogado defensor de Daniel Cortés, que en la madrugada del 20 de febrero de 2017 mató de un disparo a su padre cuando estaba acostado en su cama, en el piso en el que vivían en el barrio de El Perú.

El ministerio fiscal pide 17 años de prisión para él, mientras que el abogado defensor sostiene que estaba tan bebido que no era responsable de lo que hizo, y por ese motivo solicita su libre absolución.

La Fiscalía de Cáceres reconoce que el acusado estaba bebido cuando llegó a su casa, pero señala que no tanto como para conducir sin problemas su coche durante casi dos kilómetros, entrar en la vivienda sin que se despertara su familia, cargar su escopeta y disparar al padre, desde tan cerca que el taco que contenía 12 perdigones quedó alojado en su cuerpo.

Para el fiscal, por el contrario, no hay pruebas de que hubiera una discusión previa al fatal desenlace entre padre e hijo; para el abogado defensor sí que hubo esa discusión. Afirma que Daniel Cortés ocupó el servicio, se despertó el padre y al pensar que quien estaba dentro era su mujer, empezó a insultarla. «Ese fue el detonante para que le disparara Daniel: los insultos hacia la madre».

Según han declarado el acusado y varios familiares, Ángel Cortés Solana, maltrataba a su esposa y Daniel y su hermana seguían viviendo en la casa para no dejar sola a la madre. No existían, en cambio, denuncias por maltrato.