Nadie diría que pudiera ser así a tenor de la caída del número de estudiantes y los hábitos de alojamiento por los que estos apuestan, con auge de los pisos compartidos en detrimento de colegios mayores y residencias. Las noticias sobre el cierre de estos últimos son habituales, pero Cáceres también se suma a la tendencia contraria. Así se deduce de la recuperación por parte de la Diputación de su antiguo colegio mayor Francisco de Sande (ya en ejecución en la Casa Pereros con una inversión cercana a los cuatro millones). No es un caso único. El Ayuntamiento aprobó ayer por unanimidad en el pleno la tramitación del expediente para abrir una residencia universitaria privada en el Nuevo Cáceres.
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El proyecto fue presentado inicialmente por una sociedad limitada de Valladolid, ICR Projet Manager, vinculada a la explotación del parking de Primo de Rivera. Así lo confirma su administrador, Javier Ovalle. La futura residencia tendrá 288 plazas y afronta una inversión de 5,7 millones.
El centro iría en unos terrenos municipales situados entre las calles Pierre de Coubertin, Ronda de la Pizarra y Juan Solano Pedrero. Según consta en el catastro, se trata de una parcela sin edificar que cuenta con 10.455 metros cuadrados. En ese suelo se levantaría un edificio con tres alturas. El sótano se destina a aparcamientos, 30 en total. La edificabilidad, según el informe de los técnicos de Urbanismo, es de 8.046 metros cuadrados. La cesión municipal sería de algo más de 5.000 metros cuadrados, los necesarios para ejecutar esa propuesta que tuvo entrada en el Consistorio en mayo de 2017. Esta semana ha salido adelante por unanimidad tanto en comisión como en pleno. En la votación se ausentó el concejal Antonio Ibarra. El edil de Ciudadanos es socio en la mercantil ARC del arquitecto Eduardo Reveriego, que ha dirigido el proyecto. Ibarra evita de esta forma un posible conflicto de intereses. No en vano, en el caso del parking de Primo de Rivera ya lo hizo también.
Con la memoria justificativa y los estudios elaborados por los técnicos del Ayuntamiento, la valoración de la parcela es de 255.384 euros. La inversión estimada para la puesta en marcha de esta actuación se eleva a 5.752.921 euros. Los arquitectos del área de Urbanismo cifran un periodo de amortización de 50 años y un canon al que también alude la Intervención municipal por el seis por ciento anual del valor de los bienes. La cifra que se contempla para dicho canon se eleva a 15.323 euros.
Los detalles aún están por concretarse. Los grupos políticos, en principio, se han pronunciado a favor, pero hay que ver cómo se artícula esa denominada 'concesión demanial', que es la figura jurídica por la que el Ayuntamiento cede durante un determinado periodo de tiempo su suelo para el desarrollo de una actividad que no se considera de obligado cumplimiento público por su parte. El dictamen inicial es favorable, pero el uso privativo de ese bien de dominio público deberá circunscribirse en exclusiva a su aprovechamiento docente. No en vano, se pide a la empresa algún tipo de certificado por parte de la administración educativa o la Universidad de Extremadura de que se dará ese uso.
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«Tenemos un convenio con la Universidad», afirma Javier Ovalle, que subraya que su empresa pretende explotar el nicho de mercado que tiene este sector. «Ofreceremos estancia de calidad en unas instalaciones modernas, con espacios comunes y gastos compartidos a esos estudiantes que están viviendo en pisos antiguos en Cáceres», resume. El precio sería similar o inferior.
Entre los trámites urbanísticos está la elaboración de un Plan Especial. Se añade que si no hay una concesión directa, se debería convocar un concurso público de explotación de proyecto, con los consiguientes pliegos administrativo y técnico. Podría darse el caso de que la empresa proponente no resulte al final la adjudicataria. Ello genera «una gran inseguridad», lo que complicaría igualmente «el proceso futuro de adjudicación y ejecución del contrato», se resalta en la documentación adicional. Los informes municipales aluden a un asunto «de gran complejidad» y que excede las propias competencias de secciones como la de Patrimonio. «Este proyecto es fruto de una iniciativa privada que se impulsará para comprobar la viabilidad de la misma, teniendo en cuenta que al tratarse de una residencia de estudiantes deberá adaptarse en su totalidad a la normativa que sobre este tipo de instalaciones existe en nuestra Comunidad Autónoma», informó el Ayuntamiento al término de la comisión de Urbanismo del pasado miércoles.
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Otro informe, en este caso del IMAS, da el visto bueno al cambio de la parcela de dotacional social a docente. La iniciativa llegó por parte de ICR Projet Manager SL. Con sede en Valladolid, creada en 2015 y con un capital social de 15.010 euros, la sociedad refleja en su página web que «las concesiones son un instrumento habitual utilizado por la administración para el desarrollo de proyectos que añadan valor a sus ciudades».
Cita el caso de Cáceres, «participando en estos momentos en la concesión del aparcamiento subterráneo Primo de Rivera», relata con fotos de la presentación del parking en las que se ve a la alcaldesa y directivos de la empresa. Recoge que operó en la construcción para Herce-Riosa, la adjudicataria del aparcamiento, a la que está vinculada. En la documentación que entró en el Ayuntamiento en mayo pasado se incluye una memoria explicativa del proyecto de residencia estudiantil. Aparece otra sociedad, en concreto Residencia Universitaria Pierre de Coubertin Cáceres SL.
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Está registrada en Madrid y se constituyó con un capital social de 3.000 euros el pasado mes de abril.
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