La fadista Katia Guerreiro cierra este viernes Los Conciertos de Pedrilla

Katia Guerreiro es portuguesa, pero nació en Sudáfrica en 1976. Es cardióloga de profesión, pero ha compaginado su trabajo con su amor por la música y se ha convertido en una de las principales intérpretes de género fado.

En su carrera que comenzó en 2001 es de casi 20 años, y se resume en diez discos y en presentaciones en más de 20 países, Guerreiro se ha caracterizado por conservar, en sus interpretaciones, las tradiciones del fado. Este género hace mucho se convirtió en uno de los legados culturales más importantes de Portugal.

A lo largo de su vida musical, ha recibido diversos premios. Ha sido reconocida como 'Personalidad Femenina del Año' en 2005; ha ganado el premio de 'Mejor Intérprete de Fado' de la Fundación Amália Rodrigues en 2010. En 2013 obtuvo uno de los reconocimientos más altos que el gobierno francés otorga a los ciudadanos extranjeros. Recibió la Orden de las Artes y las Letras de Francia, que la reconoció como una de las cantantes más importantes de su generación y gran embajadora de Portugal en el mundo.

En 2015 recibe el galardón 'Comenda del Infante D. Henrique' otorgado por Presidencia de la República Portuguesa y en 2016, Katia Guerreiro se convirtió en la primera artista portuguesa que actuó en la Gran Sala de la Ópera de Lyon.

La fadista es la sexta y última artista que actúa en los jardines del Museo Casa Pedrilla este verano. Han pasado por el escenario desde el 12 de julio hasta hoy, cada viernes: Rita Payés, Iván 'Melón' Lewis, Kalàscima, La Habitación Roja y Javier Ruibal.

Esta edición es la primera en la que se ha cobrado por las entradas, cuyo precio era de cinco euros. Antes se podía acceder de forma gratuita hasta completar aforo: 1.200 personas, de las que 800 cuentan con asiento.

El balance actual, según la Diputación Provincial, es de una media de 600 asistentes. El concierto del grupo de música indie La Habitación Roja ha sido el espectáculo con mayor acogida por parte del público con 900 entradas vendidas. El resto de espectáculos han oscilado entre los 500 y 600 asistentes. Por el momento, en ninguno de los casos se han llegado a llenar los jardines.