El retraso en contratar la nueva flota policial de Cáceres y su deterioro obligan a negociar una renovación

«La flota necesita una renovación. Se prepara un nuevo pliego porque las condiciones han cambiado por la guerra y la crisis de los microchips», admite el jefe de la Policía Local, Benedicto Cacho. La solución provisional mientras llega ese contrato, asume, es negociar un cambio de los vehículos que más urgen.

«La empresa no está obligada, pero estamos hablando», resume Cacho. Para Andrés Licerán, concejal de Servicios Públicos, la sintonía con la mercantil es buena y se buscará esa solución a la espera de cerrar la nueva licitación. «Debemos cambiar las condiciones», aclara. Por ejemplo, con las dos grúas se irá a una compra directa del Ayuntamiento o a un renting con opción de compra que sea atractivo para las empresas.

El último contrato era por cuatro años y algo más de 1,14 millones de euros, aunque incluía algunos vehículos de otras secciones municipales. Se publicó en junio y se adjudicó en marzo pasado, pero solo los lotes de Policía de las motocicletas y el furgón de atestados. Los sindicatos han reconocido el deterioro que vienen sufriendo los coches, aunque el concejal de Servicios Públicos señala que la situación «no es grave» y se acometerá la renovación. Intervención, la jefatura policial y Contratación abordan los cambios que hay que introducir en los pliegos para su publicación. En el mejor de los casos pasarán más de seis meses entre su anuncio y la firma del contrato.

«Nos iremos a final de año, por eso queremos cambiar mientras los vehículos patrulla para operar con garantías estos meses», confirma Benedicto Cacho.