Imagen del exterior de la estufa fría del parque del Príncipe, cerrada a las visitas por los daños provocados por el óxido. JORGE REY

El invernadero del parque del Príncipe de Cáceres lleva meses cerrado por deterioro de la estructura

El invernadero del Príncipe lleva meses cerrado por deterioro de la estructura

Cristina Núñez

Cáceres

Viernes, 3 de mayo 2024, 07:26

La estufa fría, el invernadero del Parque del Príncipe que recrea condiciones tropicales y alberga más de 300 especies de plantas diferentes permanece cerrada a las visitas desde el pasado mes de febrero. El motivo es el desgaste de la estructura metálica del interior ... de este recinto de 500 metros cuadrados a causa del óxido, que ha ido haciendo mella en las pasarelas y la columnas que sirven de marco a este vergel inesperado de exotismo que no todos los cacereños conocen.

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Fue el servicio de prevención del riesgos laborales del Ayuntamiento el que ordenó esta medida, el cierre, para evitar daños en los trabajadores de los jardines y en los visitantes, principalmente escuelas taller, colegios, asociaciones vecinales y ciclos de jardinería, que llegan procedentes no solo de esta ciudad sino también del resto de la región. El edificio cuenta con una pasarela superior que puede atravesarse y que actualmente peligra.

Tal y como informa el consistorio actualmente se está llevando a cabo un estudio patológico sobre la situación del invernadero para determinar exactamente cuáles son los daños que tienen que afrontar. «Una vez que concluya dicho estudio se procederá a su reparación».

A pesar de ese cierre las plantas continúan siendo atendidas por el personal de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Cáceres, que tienen que acceder con casco a este jardín tropical. Toda la instalación de riego continúa activa y por ahora no hay riesgo de que haya daños en las plantas que habitan en este espacio creado por Diosdado Simón, jefe de parques y jardines fallecido en 2002 y para el que tomó como modelo la estufa inaugurada en 1933 en la ciudad de Lisboa.

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Aunque durante años funcionó como un almacén, a partir de 2010, y con fondos del Plan-E, se abrió a las visitas en horarios limitados.

Las plantas están agrupadas por familias y distribuidas por isletas que tienen las mismas condiciones y que permiten la manipulación por separado. Esto sirve para evitar el crecimiento descontrolado de las raíces.

Exotismo

La estufa fría cuenta con variedades que normalmente viven en la selva tropical, lo que le concede un exotismo inesperado. Entre ellas están el ficus o la epitifita, una planta que crece en las selvas de México y Argentina.

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Pueden verse también numerosas plantas acuáticas en el acceso de la estufa fría y en los estanques donde se han introducido peces y anfibios.

Son muy llamativos también los helechos arbóreos, consideradas plantas más antiguas del planeta, llegando a ser alimentos de dinosaurios, según la información sobre la estufa fría que puede leerse en una página web gestionada por Talher.

Begonias, que proceden del Caribe, Cícadas, originarias de India Japón o Formosa también son especies que pueden admirarse en este recinto. Hay también plantas carnívoras que obtienen los nutrientes de los insectos que atraen con una sustancia que segregan. También están las plantas colgantes, que aportan un gran color en toda la Estufa Fría. Hay plantas que destacan por sus formas como son la del ave del paraíso, el laurel tóxico, el trompetero gigante, el cuerno del arce, la planta cola de caballo o la planta pata de elefantes.

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Además de plantas exóticas y tropicales, en este gran invernadero también puede verse ver una pequeña colección de nidos de pájaros que se han ido recogiendo recogidos en el parque del Príncipe.

El edificio cuenta con un sistema de riego y climatización

La recreación del clima de los lugares exóticos en la estufa fría se lleva a cabo a través de un sistema automatizado de riego y climatización que controla la temperatura, tal y como puede leerse en la web Naturalmente Cáceres, una actividad de educación ambiental que puso en marcha la empresa Talher para dar a conocer el medio natural. Si la temperatura es baja se accionan los radiadores, si es alta se ponen en marcha los pulverizadores, que controlan la humedad de este espacio y que se activan a través de un termostato. Hay también unos focos instalados que proporcionan horas de luz a cada uno de los grupos de plantas que habitan este vergel tropical, una sorpresa escondida en el Parque del Príncipe.

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