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Fue una escena de película. Era la noche del 17 de abril de 2024. Un vehículo, Audi, de gran cilindrada, a toda velocidad por ... las calles de Cáceres en plena madrugada. A bordo iban dos jóvenes que apenas sobrepasaban la mayoría de edad, entonces con 18 y 19 años. Circularon por la carretera N-630 sin luces y «haciendo caso omiso a las numerosas señales acústicas y luminosas que les dieron los agentes de Policía» para que se detuviesen.
Pasaron por la Hispanidad, se saltaron un semáforo y, a la altura de la calle Colombia, un hombre tuvo que saltar para evitar ser arrollado. Por el puente de San Francisco perdieron el control y provocaron daños a otros vehículos aparcados. Uno de ellos por más de 3.500 euros. Camino Llano, Clavellina o San Antón, en sentido contrario, formaron parte de un itinerario más propio de una película de acción que de la tranquilidad de la noche primaveral cacereña.
Aquel miércoles se movilizaron hasta seis coches patrulla. Uno de ellos se cruzó en mitad de la vía en la avenida de Cervantes para detenerles. Dos agentes resultaron heridos.
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Los hechos figuran con esos y otros detalles en una sentencia del Juzgado de Instrucción número 3 de Cáceres del 20 de marzo. Los dos jóvenes, que no tenían antecedentes penales, afrontan delitos diferentes. En el caso del conductor se le condena a una pena de prisión de cuatro meses con inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio en ese tiempo. No podrá conducir durante ocho meses. Se le considera responsable de un delito contra la seguridad vial en la modalidad de conducción temeraria. Tendrá que asumir, de forma solidaria con la aseguradora, el coste de los daños causados a otro vehículo.
El copiloto es autor de un delito de resistencia a los agentes de la autoridad. Afronta cuatro meses de multa a razón de seis euros diarios, es decir, 720 euros. También tendrá que pagar una sanción diaria de seis euros durante 20 días (120 euros) por un delito leve de lesiones a un agente. 840 euros en total. Además, ambos deberán indemnizar a los policías que resultaron heridos por algo más de mil euros.
La sentencia es firme, ya que se produce tras un acuerdo de conformidad. La Fiscalía pedía seis meses de prisión para el conductor y privación del derecho de conducir por un año y un día. Para el copiloto solicitaba seis meses de multa a razón de seis euros diarios por resistencia a los agentes, además de una multa de seis euros diarios durante un mes por el delito de lesiones.
Ambos pueden beneficiarse de la reducción de un tercio que contempla la ley para los casos de sentencia penal condenatoria de conformidad, tal y como suscribieron sus respectivos letrados, José María López-Asúnsolo y Eladio Barrantes.
Según informó HOY en su día, la persecución provocó que medio centenar de personas se acercasen hasta la zona en la que se produjo la detención ante la expectación y la alarma creada en plena noche.
El Audi en el que viajaban los jóvenes se detuvo tras interponer los agentes un coche oficial en mitad de la vía. El conductor dio un volantazo, recoge la resolución, y colisionó con el vehículo policial. Un agente resultó lesionado con latigazo vertical y contractura muscular. Necesitó 20 días para recuperarse. Otro agente, que dio el alto al copiloto cuando salió huyendo a pie, fue golpeado en la espalda por este y necesitó 16 días de atenciones médicas. La aseguradora ya ha pagado 5.800 euros a vehículos que sufrieron daños.
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