Duelo de estilos entre murgas

En otros concursos, las murgas que pelearán esta noche por un puesto en la final del concurso de Badajoz no competirían jamás en la misma categoría. Una de las características que enorgullece a los carnavaleros pacenses, sin embargo, es que todas las formas de entender una murga caben en el escenario del López de Ayala. Así, Marwan pondrá su estilo comparsero, Los Mirinda darán la vuelta a la tortilla con una chirigota pura y Las Chimixurris demostrarán, una vez más, que saben equilibrar ambos estilos. Y esa solo será la mitad de una noche en la que también actuará la sorpresa de esta edición, De Turuta Madre con su personaje de Joaquín Parra, y cerrarán dos de las agrupaciones que más han hecho reír este año al público, Los Chungos y Los Camballotas.

La primera parte de la noche también podría considerarse un duelo a la mejor puesta en escena. Tras el impresionante montaje de Al Maridi ayer, hoy llegarán la fábrica de sueños de Marwan, el edificio con cornisa desde el que cantan los miembros de Los Mirinda y quizá el montaje más original y espectacular, el de Las Chimixurris. Son la Faraona, jugando con la mezcla del flamenco y la cultura egipcia, y en su escenario se recrea una calle de Badajoz con dos grandes edificios y un arco que, en realidad, representa un templo del Antiguo Egipto. Una maravilla que merece fijarse en cada uno de sus detalles.

En cuanto a los repertorios, Marwan vuelve a apostar por la lírica y la calidad de sus voces y convierte su actuación en una poesía sobre los sueños en la que aprovechan para repasar deseos de los pacenses, como aumentar la seguridad. Los Mirinda cuentan con una de sus actuaciones más potentes de los últimos años. Son un hombre al que ha sorprendido el marido de su amante y deben refugiarse casi desnudos en la cornisa. Las Chimixurris convierten sus 22 minutos en escena en un tablao flamenco con su habitual repaso ácido de la actualidad local.

Tras el descanso, tocará cambio de tercio. De Turuta Madre apenas tiene el telón como escenario, pero sus puntazos interpretando al presidente del Badajoz les valieron ganarse al público y al jurado. Los Joaquín Parra salen con su maletín de billetes a poner playa en el Guadiana o construir el Nuevísimo Vivero. Esta murga, compuesta por excomponentes de otros grupos, ha debutado por lo alto y es el pelotazo del año.

Tras ellos actúan Los Chungos, que este año son divorciados y, con un estilo más pulido y mejores voces de los habitual, parece que han madurado y han dado con un registro que les beneficia. Tienen uno de los popurrís más divertidos y muchas gamberradas políticamente incorrectas.

Su personaje, que está en una discoteca vestido de moderno, está enganchado al Tinder y ha hecho 'match' con el público, es decir, se lo ha ligado.

La apuesta por la comedia también es el estilo, aunque más tirando de juegos de palabras, de Los Camballotas de Olivenza, que cerrarán la noche con sus moribundos a las puertas del Hospital Universitario, un escenario también muy trabajado que mezcla en centro sanitario con las puertas del cielo. Una propuesta original en la que recorren su último día en la tierra dedicando el 100% de su repertorio a hacer reír.

Cuando acaben Los Camballotas, será el turno del jurado. Se sumarán las puntuaciones de las 12 semifinalistas (cuenta su pase en preliminares y en esta segunda fase) y se mostrará en la pantalla de la plaza Minayo quiénes son las seis murgas que compiten por la gloria el Viernes de Carnaval.