Otro quinto, por favor sale goleando de la primera batalla

'Otro quinto, por favor' ha salido reforzado de la primera gran batalla del concurso de murgas, ya que varias agrupaciones favoritas han coincidido en la segunda semifinal. Los camareros y sus clientes se han crecido en la segunda fase aunque los Water y las Chimixurris mantienen sus opciones de cara al viernes.

Por lo demás, en la segunda semifinal también destacaron los Camballotas que han logrado que el público pida verles de nuevo el viernes.

Los Water Closet abrieron la segunda semifinal y pusieron al teatro en pie. Los vigentes campeones no han notado el peso de su victoria en 2018 y quieren la cuarta en 2019. Tienen de los mejores popurrís y lo disfrutaron, ellos y el público que ya está completamente metido en su mundo de científicos con el número pi y todos sus chascarrillos.

Gustaron mucho sus cuplés y su segundo pasodoble, sobre la violencia machista, fue ovacionado. Los Water no pinchan y volverán a estar en todas las quinielas.

'Otro quinto, por favor' también estará en muchas quinielas de victoria y es que, aprovechando el Madrid-Barça, han metido un gol. Tienen la presentación más potente del concurso y lograron una ovación del público nada más arrancar. Desde luego, como ellos dicen, la gente se marcha contenta.

En su primer pasodoble se salieron de su tono habitual, siempre divertido o crítico, y emocionaron a todo el mundo al recordar a Alberto González, el niño Garfio, que falleció recientemente. Un murguero muy querido por, entre otras razones y cómo esta murga bien ha destacado, una sonrisa eterna. En su segundo pasodoble optaron por otra emoción y levantaron al público con una durísima crítica al alcalde.

Sus cuplés, sin embargo, fueron más flojos que en la primera fase pero calentaron al público con la complicidad entre Chiqui y Cano, un clásico que no falla. Habrá que ver qué lían en la final en este restaurante.

El tercer puesto fue para Los Camballotas que no pasaron por semifinales para cumplir. Esta murga pide otro bis y el público les apoya. Levantaron al patio de butacas y se echa de menos un grupo con esa energía en la final. Lo dieron todo y merecen más.

Tuvieron dos pasodobles muy críticos y una actuación desternillante como unos pobrecillos a los que les ha dejado la novia y están de viaje en Punta Cana. Su interpretación es de premio y el esfuerzo en voces que se han marcado este año. Cuando más difícil está la final, con solo seis puestos, parece ser cuando Los Camballotas tienen más posibilidades.

Tras el descanso La Castafiore se estrenó en semifinales. Esta murgas logró el pase sólo unas horas después de debutar, pero eso ya ha sido mucho. Les costó defender su puesto, aunque fueron de menos a más y se calentaron en el popurrí.

Puede ser comprensible en una debutante, pero el repertorio que cambiaron no estaba a la altura del primero y además cantaron muy inseguras. Notaron que el público no respondía y aún titubearon más. La Castafiore ya ha hecho mucho este año, pero sus esclavas han terminado su recorrido.

Las Chimixurris mantienen sus opciones a todo tras su actuación. Quizá su propuesta como Eva sorprendió menos y entraron un poco frías, pero cuentan con una de las actuaciones más completas de todas. Unen buenas voces, puesta en escena, estilo, letras y humor. Dice su letra que son la primera mujer y, porqué no, podrían ser las primeras mujeres en ganar este certamen.

Lograron la ovación del público y, de nuevo, plantearon el mejor repertorio de actualidad local. Dedicaron sus nuevos pasodobles a la falta de apoyo institucional al Carnaval y a las malas comunicaciones de Extremadura

Para terminar, A Contragolpe cerró bien la segunda semifinal con sus cirujanos plásticos. Lograron conectar mejor con el público, especialmente en en popurrí y optaron por dos pasodobles muy críticos que también gustaron.

Esta murga ya es un fijo en semifinales y sabe hacer un buen papel.