Santiago Posteguillo. HOY

Aventuras romanas

Julio César. 'Maldita Roma' consigue conmover el alma y conquistar, no solo los territorios de Hispania y de la Galia en los que se adentra su protagonista, sino también el corazón de sus lectores

Luis Javier Conejero Magro

Viernes, 6 de septiembre 2024, 23:25

Hay libros cuya lectura deja un buen sabor de boca. Y qué mejor opción para uno de nuestros pasatiempos estivales y vacacionales que una novela ... que nos deje ese regusto y que nos entretenga con una acción galopante. A pesar de que yo, como todo el mundo, ya conoce la historia de Julio César, la segunda novela de la hexalogía que está escribiendo Santiago Posteguillo, 'Maldita Roma: la conquista del poder de Julio César', entrelaza la emoción que suscitan las batallas en las fronteras del imperio con la frustración de las brutalidades políticas que se cuecen en el corazón de la Roma clásica. Publicada a finales de 2023 por Ediciones B (Penguin Random House), la novela nos narra los años de juventud y temprana madurez en los que César consigue volver a su Roma natal, después de su exilio, para verse convertido, al final de la novela, en el procónsul que deberá frenar el avance de los pueblos galos. Aunque 'Maldita Roma' puede leerse independientemente, la primera parte de esta serie, 'Roma soy yo' –best-seller con más de 180.000 ejemplares vendidos en España en 2022, según la consultora GFK y CEGAL–, nos dejaba precisamente, gracias a un final suspendido, en el momento de la vida de César en que este debe abandonar a su familia, puesto que los juicios que emprendiera contra el tirano Dolabela lo han convertido, con peregrinos argumentos, en persona non grata. Estas diferencias políticas son el resultado de la afinidad que César tenía con los sectores más populares y las clases más desfavorecidas… al menos al principio de su vida.

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Santiago Posteguillo novela –o más bien ficciona– las aventuras y las contingencias en las que se embarca y contra las que batalla Julio César. Esta travesía literaria nos hace viajar desde la huida de nuestro protagonista de los piratas cilicios, que lo han secuestrado, en la primera parte de la novela, hasta su campaña militar liderando sus legiones romanas contra las tribus galas, en la cuarta y última parte de la narración. También nos presenta Posteguillo, en lo que catalogamos como segunda y tercera partes de la novela, lo que hoy día denominaríamos política exterior y que no afectaba tan directamente al corazón del imperio de Roma. Si la primera parte, con una fluidez asombrosa, nos relataba el enfrentamiento de César con los piratas, la segunda parte de la novela pasea al lector por algunas de las localidades romanas en España que todavía hoy tienen una importancia irrefutable, y que se presentan en este orden en la historia: Medellín, Liria, Sagunto, Tarragona, Valencia –de la que cuenta su total destrucción en el 75 a.C. y anuncia su reconstrucción por el sobrino nieto de César, Augusto– Játiva, Palencia, Pamplona, Coca (en Segovia), Calahorra o Cádiz, entre otras, para contarnos la guerra en Hispania entre Sertorio y Pompeyo. La tercera parte se centra de una manera excepcional en la rebelión de Espartaco, en la que el autor nos asombra y mantiene en vilo gracias a las partes más castrenses de su ficción. Jugando con la historia, torciendo algunos enigmas de las crónicas romanas y haciendo uso del conocimiento general que todos poseemos al rememorar la película de Espartaco (1960) de Kirk Douglas, el autor nos hace cuestionarnos si, al no encontrarse nunca el cadáver del gladiador sublevado, tal vez este sobreviviera. Entre belicosos debates en las gradas del Senado y el estruendo de los gladios en los campos de batalla, la cuarta parte de esta novela finaliza con el ascenso político de César, dialécticamente enfrentado a Cicerón o Catilina, entre otros, y su campaña en la Galia. Según el autor, todo esto provocará daños físicos y psicológicos que persistirán a lo largo de toda la vida de César y que nos contará, con su particular carácter pedagógico, en las novelas que están por venir. A lo largo de todas estas cuatro partes, la historia de 'Maldita Roma' se equilibra entre los berridos y la agresividad de los personajes masculinos, y el susurro y la suspicacia de los femeninos. En efecto, en esta novela se nos presentan, de un modo casi parentético o paralelo a la historia de Roma, los plácidos ciclos vitales del nacimiento, la niñez y la adolescencia en Egipto de un personaje que se espera que cobre una importancia sin parangón en las próximas novelas de la serie: Cleopatra. Y de una valía sin igual son también, tanto para la historia como para la vida de César, el tesón de su madre o la silenciosa valentía de su hija, cuya boda con el enemigo político de César, Pompeyo, pone el broche de oro a esta historia.

Novelas históricas como esta, en las que los lectores llegamos a cruzar el Rubicón y a enfrentarnos a la traición de algún amigo como Bruto, son sólo posibles gracias a la pluma de un escritor como Posteguillo, quien, como Clío, musa de la epopeya griega, susurra al oído del narrador omnisciente los triunfos y las miserias de un personaje tan emblemático como César. Pues, qué mejor aventura que 'Maldita Roma', porque consigue conmover el alma y conquistar, no solo los territorios de Hispania y de la Galia en los que se adentra su protagonista, sino también el corazón de sus lectores.

Maldita Roma: La conquista del poder de Julio César.

Santiago Posteguillo. Ediciones B. 896 páginas. 24,90 euros.

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