Juan José de Lama. ALMUZARA

Hernán Cortés, sueños de tlaotani

Memorial ·

Esta obra desea aproximar a los lectores la figura de un personaje extraordinario, polémico sin duda, pero de relevancia indiscutible

Manuel Pecellín

Sábado, 14 de diciembre 2024, 12:41

Juan José de Lama, nacido en Madrid, es ingeniero industrial por el ICAI y un fervoroso admirador de Hernán Cortés. Especialista en energías renovables, ha ... venido combinando su labor profesional con el estudio del extremeño, a quien considera uno de los líderes históricos más sobresalientes. Quiso hacerle un homenaje para recordar el V aniversario de la Conquista de México realizada por aquel durante un trienio intensísimo. Con este fin, fue componiendo desde junio de 2018 un extenso hilo de Twitter (pasa de 3.000 entradas) ingeniosamente concebido: imaginó un 'diario de campaña' en el que Cortés habría dado cuenta minuciosa con su propia pluma de cuantos acontecimientos le acaecían cada jornada de aquel periplo desde Cuba a la conquista de Tenochtitlán. Ese es el origen de esta obra, que desea aproximar a los lectores la figura de un personaje extraordinario, polémico sin duda, pero de relevancia indiscutible.

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El libro abre con una extensa entrada de Esteban Mira Caballos, el americanista andaluz llegado a Extremadura hace seis lustros, quien en su 'Hernán Cortés, una biografía para el siglo XXI' (Barcelona, Editorial Crítica, 2021), escribió el texto citado: «Hernán Cortés fue una persona de carne y hueso, un conquistador del siglo XVI, con sus virtudes y sus defectos. No poseía una excepcional capacidad estratégica… ni tampoco era un mesías o un pacifista laico… Pero sí fue un personaje extraordinariamente singular, por su carisma y por su capacidad para fascinar a millares de personas a lo largo de varios siglos». Son cualidades que en este 'diario' se manifiestan, sin olvidar la tesis suscrita por el Ch. Duverger, quien subraya que el de Medellín rompió con el esquema clásico de la violencia y de la fuerza, manifestándose como el conquistador que amó a los vencidos, con el sueño de convertirse un día en tlatoani (el que habla, el gobernante) de las nuevas tierras. No sin fundamentos, Cortés se vanagloriaba de haber conseguido para Carlos V más tierras de las que este había heredado.

Para escribir este memorial como la voz misma del extremeño, Juan José de Lama se inspira fundamentalmente en las célebres Cartas de Relación, la Historia de la Conquista de México de López de Gómara y la Historia verdadera de la conquista de la Nueva España de Bernal Díaz del Castillo. Se sirve también de numerosos «documentos cortesianos», accesibles en la red (textos firmados por Hernán Cortés o los escritos en su nombre o por encargo, así como informes de los hechos que lo involucraban: cédulas, provisiones, instrucciones, juicios, denuncias, reclamaciones, etc., no siempre favorables a su persona). El autor reproduce literalmente no pocos, transcritos en cursivas. Algunos son quizás demasiado extensos, v.c., el de las Capitulaciones o Instrucciones impuestas por Velázquez a Cortés (páginas 30-45), aunque aparezcan con sabrosos supuestos comentarios del segundo. Dígase lo mismo sobre las Ordenanzas militares establecidas por Cortés (páginas 269-272). Tal vez quitan frescura literaria a la novela, aunque incremente su verosimilitud histórica.

Contraponiéndolo a menudo a Pedro de Alvarado y otros, que lo acompañan y asisten, y enfrentándose de forma rotunda a la Leyenda Negra, el autor, aun a costa de ocultar o poner sordina a los defectos, infidelidades y actuaciones crueles, facilita percibir las virtudes relevantes del metelinense: inteligencia, imaginación táctica, oratoria, generosidad con los suyos, valentía, resistencia física, visión de futuro, hábil empresario, religiosidad sincera, cultura notable y, sobre todo, genio empático para conseguir adhesiones de pueblos indígenas sometidos por los aztecas (toltecas, tlaxcaltecas, olmecas: indios vences a indios) o huestes adversarias (v.c., las de Narváez). Sin que decaiga nunca, el interés se acrecienta al referir acontecimientos álgidos, digamos los encuentros con la Malinche, el cacique Gordo o Moztezuma, la Noche Triste, destrucción de ídolos, batalla de Otumba o el difícil sitio y conquista de la capital azteca.

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Lama escribe en una prosa limpia, a la que maltrata el uso reiterado de sintagmas incorrectos construidos con preposición más formas pronominales o adjetivas (tipo «detrás mía», «cerca mía», «alrededor nuestra»). También me parecen inoportunas, por anacrónicas, las fórmulas coloquiales modernas en personajes del XVI. Por el contrario, sobresale en el manejo de campos léxicos como los de la marinería, ejércitos, batallas, religión, leyes, usos y costumbres indígenas.

La obra lleva un extenso prólogo (páginas 13-22) del doctor Alberto G. Ibáñez, que también tiene publicados en Almuzara libros como 'La Leyenda Negra. Historia del odio a España' (2018) y 'La Guerra cultural. Los enemigos internos de España y Occidente' (2020).'

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Yo, Hernán Cortés. Diario de Campaña

Juan José de Lama. Editorial: Almuzara. Córdona, 2024. 2x636 páginas. 21 euros.

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