En la reunión del periódico

Amén de un par de recopilaciones de sus célebres 'plumillas', entre otros volúmenes tiene en su haber los de memorias 'El campanar d'Ivars', 'Sis setmanes' y 'Mis seis diarios'; ensayos monográficos sobre la catedral anglicana de Londres, la Unión Europea o el papa Juan Pablo II; y hasta algunas novelas, la mejor de ellas 'Com una barca al mig de l'estany'.

Y luego trabaja un género a medio camino donde vuelca sus conocimientos y recuerdos sobre intereses que han tenido que ver con su trayectoria vital y profesional. Con esa impronta ha publicado 'De profesión periodista', donde hablaba de figuras emergentes que hoy son instituciones del sector (aunque de la nómina que allí proponía ninguno trabajó el artículo diario, o al menos no tantos años como él); 'Dios y los periódicos', sobre esa relación que se ha mantenido desde que el periodismo es periodismo; y 'Cuando veáis que la luna os sonríe', sobre los grandes descubrimientos del hombre en el pasado siglo.

A ellos se une ahora 'Sorpresas para una hoja en blanco'. En sus primeras páginas se especifica que se refiere a las reuniones diarias donde se estructuran los contenidos de los periódicos. El autor explica cómo en sus experiencias en las direcciones de 'El noticiero' de Zaragoza y 'Diari de Tarragona' vio varias veces caer las propuestas propias y las de su equipo directivo en favor de inesperadas noticias de última hora, que por importancia o impacto reclamaban mayor atención: esas serían las sorpresas a las que alude el título.

En la docena de capítulos que siguen a este teatimonio, Antoni Coll se ocupa de aspectos como el surgimiento o la duración de la vida, el lugar de la humanidad en el espacio, la creación artística, el trabajo, la ciencia o la felicidad. Tampoco faltan la política y el periodismo, que envuelven muchas de las introducciones y tienen su propio episodio, el décimo, que incluye dos de las anécdotas mejor puestas en escena del libro, cuyos respectivos protagonistas son Tatcher y Gorbachov. Este último uno de los caracteres históricos que conoció Antoni Coll, pero tuvo una ocasión incluso más grande: la de saludar al mismísimo De Gaulle.

Julio Verne, Konrad Adenauer o Teresa de Lisieux son algunas de estas 'Sorpresas para una hoja en blanco', en las que no falta el tratamiento característico que pone Antoni Coll en todo lo que escribe, con su cuidado del lenguaje y su humanismo, que tanto ha impulsado su reconocimiento profesional.

Seguramente, los capítulos más emocionantes son dos de los últimos, 'El nombre de pila' y 'Dios por sorpresa'. Cuentan hallazgos emocionantes capaces de cambiar vidas, como los encuentros con Dios de Frossard y Claudel, o el curso de la historia, como el paseo de Reagan y Gorbachov.

Sopresas para una hoja en blanco

Antoni Coll. Editorial: Digital Reasons S. C. 100 páginas. 12 euros.