En torno al dibujo 'expandido'

Escala 'humana'. Llevo asistiendo a esta feria desde sus inicios; me gusta la escala 'humana' –una de las claves de su éxito, al igual que Arco Lisboa–, facilitándonos el contacto con los galeristas, el diálogo y cercanía con los creadores y el disfrute con calma de las piezas expuestas. Yo creo que este tipo de ferias dedicadas al dibujo resultan imprescindibles, tanto para aquellos que quieren iniciarse en el mundo del coleccionismo como para los que son meramente 'compradores' y son, también, las idóneas en contextos periféricos, pues dinamizan el medio artístico además de servir de escaparate del arte más actual.

Programa paralelo. En estos momentos, Drawing Room Lisboa es un proyecto ya consolidado, que alcanza su séptima edición, a ello ha contribuido una mejor definición de los objetivos, la exigencia cada vez mayor en la selección de las galerías participantes y la elaboración de un atractivo programa paralelo (conferencias, creación de la revista sobre dibujo 'Papeleo', exposición del premio Flad, premios Fund. Millennium bcp/talento emergente, artista destacado, mejor galería …) De ahí la variedad de público que se ha ido sumando en cada nueva edición.

Fusiones. Por otro lado, la oferta dibujística que ofrece Drawing Room Lisboa se abre a un amplio abanico de fusiones, que es una característica del dibujo contemporáneo, como remarca Mónica Álvarez Careaga, directora de la Feria. «Hay una tendencia a cuestionar las viejas jerarquías y buscar hibridaciones. Los artistas reconocen el dibujo como un medio privilegiado para expresar sus inquietudes, mezclándolo con la fotografía, la instalación o los dispositivos performativos, además de las cuestiones y técnicas pictóricas». Asistimos, por tanto, a las múltiples posibilidades del dibujo 'expandido'.

Croft, Helena Almeida, Cabrita Reis… No hay que olvidar que el dibujo está en el origen del pensamiento del artista, por tanto, un mayor conocimiento del mismo permite adentrarnos en su estética. En esta edición de Drawing Room Lisboa participan, entre otros, Helena Almeida, Noé Sendas, Gonçalo Sena, Pedro Barateiro, J. P. Croft, Cabrita Reis, Rui Sanches, Calapez, Hermann Nitsch, Catarina Dias, Armanda Duarte, Andreas Breuning, Muntazz, Sobral Centeno, Paulo Brighenti, Cecília Costa, António Faria, Pilar Mackenna, Katarzyna Pacholik, Pedro Pousada, Vicente Blanco, Irene González, Martinho Costa, Klaas Vanhee, José Ramón Ais, Emilio González Sainz, Alejandra Freymann, Teresa Moro, Pedro Paiscoinho, Valdez Cardoso, Ana Pérez Quiroga, Diogo Pimentão, Sara Bichão, José Loureiro, Daniel V. Melim, Rodrigo Oliveira, Mónica Capucho, José Bechara, … A los que podemos contemplar en las galerías portuguesas Filomena Soares, Pedro Oliveira, 111, Vera Cortês, Carlo Carvalho, Belo Galsterer, Francisco Fino, Nuno Centeno, Bruno Múrias, Fonseca Macedo, Balcony, 3+1 Arte Contemporânea, Arte Periférica, Lehmann+Silva, Tablas de Sal, No.No, Miguel Nabinho, Salgadeiras, Monitor (también en Roma), Jahn und Jahn (y en Múnich) … y las españolas Silvestre, Siboney y Trinta Arte Contemporáneo, con propuestas que incluyen artistas españoles y portugueses.

Abstracción/figuración. Finalizamos con el músico Rodrigo Leão, que inaugura 'Escuchar el dibujo', una nueva propuesta de la Sección Inmaterial en colaboración con la Fundación Millennium bcp, en torno al cruce de disciplinas artísticas: sonido y artes visuales. Otra novedad es el programa 'Habitación de invitados', creado para mostrar lo mejor del dibujo contemporáneo, en esta ocasión con tres propuestas: la abstracción inmersiva de Carsten Fock, representada por Zeller Van Almsick (Viena), la figuración dramática de Susanna Inglada, en la Galerie Maurits van de Laar (La Haya) y la gráfica maníaca y fértil de Olivier Gruber, en Invisible Galerie (Marsella).

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Drawing Room Lisboa

Sociedade Nacional de Belas Artes. Rua Barata Salguiero, 36 (Lisboa). Directoria; Mónica álvarez Careaga. Del 23 al 27 de octubre.