Los peores Knicks de la historia

El pasado 6 de enero un grupo de aficionados de los Knicks se presentó en las gradas del mítico Madison Square Garden con la cabeza cubierta por las típicas bolsas americanas de la compra, agujereadas lo justo para poder observar lo que ocurra sobre el parqué. La imagen dio la vuelta al mundo y escenificó a la perfección el hartazgo alcanzado por los fans de una franquicia de la NBA tan rica como desesperante. Desde el domingo tienen una razón más para el desencanto: las 60 derrotas -tras la infligida por los Bulls de Gasol y Mirotic por 111-80- suponen el peor registro en la historia del equipo donde recaló en verano el extremeño José Manuel Calderón.

Tres veces, desde que existen las temporadas a 82 partidos, los neoyorkinos finalizaron la fase previa con 59 perdidos. Fue en las campañas de 1985-86, 2005-06 y 2006-07, bajo las órdenes en el banquillo de Hubie Brown, Larry Brown y Isiah Thomas respectivamente. Lo peor es que la nefasta cifra de este curso es fácilmente 'mejorable' porque todavía restan dos semanas y media de competición y con las rotaciones de cada noche es imposible que ganen más de tres de los ocho encuentros que les quedan. Un quinteto inicial compuesto por Larkin, Galloway, Amundson, Lance Thomas y Bargnani igual no se metería ni en los playoffs de la liga española.

Más fachada que interior

Se intuía que el nuevo destino de Calderón representaba más envoltorio que caramelo. La capital del mundo, el Madison y sus celebrities, una franquicia histórica -más por el glamour que por lo deportivo-, la potencia mediática, el aterrizaje de un peso pesado como Phil Jackson como principal ejecutivo y como consecuencia el de su pupilo Derek Fisher para ser su voz en la pista... Todo salió mal, rematadamente mal, y muy pronto apareció la palabra 'transición', es decir, pensar en el próximo año y, una vez armados de paciencia, armarse de grandes jugadores con los agentes libres que inundarán el próximo verano. Marc Gasol entre ellos, si es que logran convencer al de Sant Boi. Eso sí que no puede salir mal por el bien del maestro Zen.

Pensar en el próximo curso implicó descuidar éste. Su jugador más importante, Carmelo Anthony, decide operarse y no se cuenta con él. Se llevan a cabo dudosas operaciones económicas para minimizar gasto que en lo puramente competitivo lastran al equipo ya que las monedas de cambio tienen un nivel ínfimo. JR Smith y Shumpert a Cleveland son un ejemplo. O Stoudemire a Dallas. Bargnani se ha pasado lesionado toda la regular season y es ahora cuando está jugando.

Calderón estuvo ausente en algunos partidos del comienzo por sus problemas musculares, volvió y se perderá el tramo final para someterse a un tratamiento de plasma enriquecido con el que espera superar sus dolencias en el tendón de Aquiles sin tener que pasar por el quirófano. El de Villanueva anunció en las redes sociales dicho tratamiento para desmentir que fue operado. Con 9 puntos y 4,7 asistencias por noche, no está siendo su mejor temporada, si bien es cierto que no es el mejor año para mirar estadísticas por todo lo ocurrido en la franquicia. Carmelo es el único con contrato garantizado en New York para la 2015-16. Los demás, incluido Calderón, son carne de mercadeo para reflotar una plantilla que no repita lo acontecido y pensar en cotas más elevadas. El base extremeño es de lo poco fiable que tienen en el roster y ya conoce el espeso 'triángulo ofensivo' de Phil Jackson. Lo que está por ver es si querrá seguir conociéndolo.