Un nefasto primer cuarto tumba al Al-Qázeres en Tenerife

Comenzó el partido con un triple de Stevanovic que fue un presagio de lo que iba a suceder a continuación. El acierto del equipo local era muy elevado mientras el cuadro cacereño anotó una canasta de Méndez en los siete primeros minutos de juego. Esos dos puntos de la jugadora ourensana fueron el único acierto de un sinfín de lanzamientos de un errático Al-Qázeres. No era de extrañar el resultado que reflejaba el marcador en el minuto siete (16-2). Filipe logró por fin ver aro y Cabrera logró dos tiros libres para dejar el marcador al final del cuarto en 22-6.

En el segundo acto, el equipo entrenado por Jesús Sánchez mejoró sus prestaciones tanto en ataque como en defensa. No era normal tanta diferencia entre dos equipos que estaban empatados a victorias en la clasificación. El juego se igualó y el conjunto cacereño consiguió frenar la sangría, pero necesitaba algo más para tener opciones de triunfo. Consiguió ganar el cuarto por un punto 11-12, pero sin imponer su juego. Tocaba remontada tras perder al intermedio por 33-18.

Tras el paso por los vestuarios dos triples consecutivos de Filipe dieron alas al Al-Qázeres. Otra canasta más de Cabrera obligó a Jaime Sañudo, técnico local, a pedir tiempo muerto. Ocete rompió el parcial de 0-8 con una canasta bajo el aro, pero Filipe estaba en racha. Otro triple más suyo y dos tiros libres convertidos por Méndez estrecharon más el marcador (35-31). Respondió Adepoju desde fuera del arco, aunque la muñeca caliente de Filipe convirtió el cuarto triple consecutivo (38-34).

El partido había adquirido una emoción impensable hasta entonces. Sin embargo, el conjunto tinerfeño no se dejó amedrentar y respondió apoyándose en Adepoju e intensificando su defensa para llegar al final del cuarto con una ventaja de once puntos (51-40).

En el cuarto definitivo, los triples de Stevanovic, Luque y Roters pusieron la puntilla a un equipo que ya no tuvo fuerzas para luchar por el triunfo (64-47). Los últimos minutos fueron intrascendentes y el equipo anfitrión consiguió incluso aumentar la diferencia desde la línea de tiros libres para castigar más a las pupilas de Sánchez.