Punto de inflexión para el Al-Qázeres para no desconectarse del playoff

El equipo valenciano, con un balance de 8-10 y precisamente uno de los que marca la frontera del playoff, viene de jugar el miércoles en casa contra Recoletas Zamora en un partido duro. Las valencianas llegaron a tener 17 puntos de ventaja al descanso, pero se dejaron remontar y terminaron cayendo por seis ante las zamoranas.

«Es un equipo que sabíamos desde el inicio de la temporada que iría de menos a más. Son jugadoras jóvenes con un gran nivel de entrenamiento. Dos de ellas jugaron recientemente en Euroliga con el primer equipo. Además, cuentan con un bloque veterano como Virginia Sáez o Lorena Segura, que aportan experiencia y estabilidad», decía Jesús Sánchez en la previa del encuentro.

Sobre las claves del partido, el técnico del Al-Qázeres subrayaba la importancia de frenar su tiro exterior y su dinámica de juego: «Cuando están acertadas, es realmente difícil ganarles porque tienen muchas armas. Pero también es cierto que si no dominan el rebote o no tienen un buen día en el tiro, se vuelven más vulnerables».

En cuanto a la situación del equipo, Sánchez confirmó que Alicia Morales seguirá de baja una semana más y que la convocatoria será similar a la del partido contra el Zamora: «Seguimos con ocho jugadoras disponibles y alguna junior que nos ayudará». Además, reconocía que el club está valorando la posibilidad de acudir al mercado para reforzar la plantilla, aunque admite que no es una tarea sencilla: «Estamos en ello, pero no depende solo de nosotros. Otros equipos también buscan refuerzos y están apretando mucho».

En este sentido, Jesús Sánchez reconoció que su mayor miedo es que «nadie me puede garantizar que las que están sanas ahora estén sanas dentro de un mes. Por eso, es mi idea ir al mercado. Si tuviera una garantía de que con estas jugadoras podíamos acabar... Confío plenamente en lo que estamos haciendo y en el equipo y en que podríamos sacarlo adelante».

Sobre la importancia del partido ante el Paterna, el entrenador evita dramatizar, pero no oculta que una victoria supondría un gran impulso. «No es definitivo, pero si ganamos, igualamos con ellas y además les tendríamos ganado el 'average'. Sería un espaldarazo anímico importante. En cambio, si perdemos y además perdemos el 'average', se abriría una brecha que nos complicaría mucho la pelea por el playoff».