La Copa, el mejor disuelvemanchas

Dice el refranero popular que la mancha de mora con otra verde se quita y el Badajoz disolvió la que traía de la derrota de Coria con una goleada ante el Mancha Real, que anoche precisamente vestía de verde. Los blanquinegros se redimieron en la Copa de su tropiezo liguero y avanzan hasta octavos ante un Segunda B decepcionante. Estas eliminatorias ante equipos de superior categoría cuando se juega tanto en la Tercera extremeña nunca se saben cómo tomárselas. El único objetivo del club pacense es el ascenso a Segunda B y para no caer en distracciones la mejor fórmula para afrontar su participación copera es competir.

Por eso Agustín Izquierdo aprovechó para el rodaje de los menos habituales y se reivindicaran manteniendo el nivel de intensidad que quiere tener en su equipo. Con el aspecto negativo de los largos desplazamientos entre semana, esta Copa viene a servir para tener a todos los jugadores enchufados para cuando las circunstancias así lo requieran, que ante el continuo goteo de las lesiones supone un factor a tener en cuenta. Todo lo contrario que pareció tomarse el envite el Mancha Real, que en ningún momento dio señales de ser un equipo de bronce en el Nuevo Vivero.

Sin la presión de un futuro en la competición ni tampoco ambiental, el Badajoz solventó con sorprendente facilidad un compromiso encajado en el calendario. Lo hizo casi sin querer. En apenas un cuarto de hora dejó resuelta la eliminatoria y pasó a convertirlo en un test en partido oficial para probarse y ajustar conceptos. El Badajoz se soltó e intentó reencontrarse con su línea de juego, especialmente en la pegada que en otros partidos lastró al equipo. Los pacenses creyeron más en la eliminatoria y se mostraron más solventes que su rival. Se lo tomaron más en serio y se notó con el fuerte arreón con el que comenzó el Badajoz. El Mancha Real parecía una caricatura de la categoría que atesora. Ya fuera por falta de tensión, interés o motivación dejó una imagen que dista mucho de un equipo de la zona media de Segunda B. La defensa hacía aguas continuamente y esa falta de atención quedó patente al inicio de la segunda mitad en el saque de una falta, se supone que ensayada, y que ninguno de los dos jugadores colocados detrás del balón acertó a sacar para poner en práctica la estrategia ante el cachondeo del Nuevo Vivero.

Escaso interés

El encuentro suscitó poco interés entre los aficionados blanquinegros. Pero los escasos 600 espectadores que desafiaron la fría noche pacense se llevaron un buen sabor de boca. El Badajoz acabó con cualquier intento de remontada del Mancha Real a los 3 minutos. Si el equipo jiennense esperaba buscar sus opciones de seguir adelante en la Copa, Joselu se las borró de un plumazo poniendo el primero de la noche. Antes habían avisado Parada con una volea que se le marchó alta y sobre todo el juvenil Zeus en un mano a mano con el portero que se fue rozando el poste. Después Parada finiquitaría el choque remachando en el segundo palo un centro de José Ángel ante el fallo en cadena de toda la defensa visitante y el portero.

El desparpajo de los canteranos es la otra nota positiva que depara esta ronda. Zeus se movió muy bien arriba y buscó continuamente asociarse con sus compañeros. Incluso se atrevió a dejar como carta de presentación un detalle de la clase que se le intuye en sus botas en un pase de tacón sobre Joselu que de no haber despejado el portero a córner habría puesto en pie al Nuevo Vivero. Un minuto antes Parada había vuelto a sonrojar la zaga rival con un nuevo cabezazo a la red tras un saque de esquina.

Sólo había pasado un minuto tras la reanudación, pero el partido ya tenía perdido todo su interés y el Mancha Real tampoco hizo nada por despertarlo. José Ángel demostró que va recuperando su nivel con dotes de liderazgo y dirigiendo el tráfico blanquinegro. El centrocampista pacense dio la alternativa a Jaime Herrera, otra de las perlas de la cantera y al que se le vio ordenar con gran desenvoltura. Con los jugadores del Mancha Real entregados desde que se bajaron del autobús, el Badajoz le sacaría aún más los colores con el cuarto de la noche. Marco Rosa fue derribado por el portero dentro del área. Cuando se recuperó buscó el balón para tirarlo, pero lo tenía Adri y el sevillano le cedió el lanzamiento. El '8' pacense rubricó una goleada con la que el equipo pacense recarga las pilas para la Tercera extremeña. El Badajoz espera rival en octavos, pero la prioridad es este domingo con la visita del Pueblonuevo.