![El Badajoz entierra su sueño en el Nuevo Vivero](https://s3.ppllstatics.com/hoy/www/multimedia/202105/23/media/cortadas/aquino_-k2UH-U140460214695hEG-1248x770@Hoy.jpg)
![El Badajoz entierra su sueño en el Nuevo Vivero](https://s3.ppllstatics.com/hoy/www/multimedia/202105/23/media/cortadas/aquino_-k2UH-U140460214695hEG-1248x770@Hoy.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
Y tocó la de Compostela. Todo el año ganando y fue a perder el partido que no debía. Le valía el empate, pero perdió su primer en encuentro en casa y a seguir intentándolo. Un palo difícil de digerir. Descalabro total. El Amorebieta ... revienta la fiesta extremeña con un campanazo en todo lo alto del Nuevo Vivero. Parecía todo montado para el Badajoz. El Nuevo Vivero, la ciudad ilusionada, una afición entregada como nunca. Pero enterró sus sueños en su estadio. El campeón de todo sucumbe ante el modesto Amorebieta.
Gorka Santamaría se peleaba con todos sus paisanos. Era como un león rodeado de hienas. No tenía salida. Íñigo Vélez dibujó una defensa de cinco y no había forma de hacerle un borrón. Incómoda. Desesperante. El Amorebieta mantenía sus líneas bien apretadas. Como el mecanismo de un futbolín. Dominaba el Badajoz. Más amenazante. Ofrecía más, pero no encontraba la manera de entrar en la cueva. Le faltaba prender la mecha. Pero no encontraba el chispazo. Gorka no llegó a un centro que peinó Clemente a centro de César Morgado. El equipo vasco esperaba su oportunidad. Lo fiaba todo al juego directo. Y llegó. Lo que son las cosas de la ocasión más clara para los blanquinegros al mazazo que nadie esperaba. Kike Royo hizo la estirada salvadora de siempre, pero el balón quedó suelto y en el segundo palo apareció Íker Bilbao para remacharlo a la red. 0-1 en el Nuevo Vivero. Miedo escénico. Lo peor que podía pasar al Badajoz ante un equipo que su fuerte es el entramado defensivo. El Amorebieta a 70 minutos de un sueño increíble.
CD Badajoz
Kike Royo; Dani Fernández, Pablo Vázquez, César Morgado, Tomás Sánchez; Jesús Clemente (Otegui, min. 61), Sergi Maestre, David Concha (Alayeto, min. 76); Dani Aquino (Ernest Forgas, min. 81) y Gorka Santamaría (Adilson, min. 61).
0
-
1
Amorebieta
Saizar; Aldalur, Aimar (Garro, min. 46), Aitor Arregui, Irazabal, Seguín (Leiza, min. 86); Larru, Mikel Álvaro (Ekaitz Molina, min. 78), Unzueta (Obieta, min. 64); e Íñigo Orozko.
Gol: 0-1: Íker Bilbao, min. 21.
Árbitro: González Francés (canario). Expulsó al portero suplente del Badajoz Miguel Narváez (65). Amonestó en el Amorebieta a Aldalur (26), Mikel Álvaro (44), Obieta (88) y Leiza (91).
Incidencias: Unos 6.500 espectadores en el Nuevo Vivero, unos 5.000 seguidores del Badajoz, 500 desplazados desde Amorebieta y otros 1.000 de compromisos federativos. En el palco, el presidente de la Junta Guillermo Fernández Vara, el alcalde Francisco Javier Fragoso y Joaquín Parra.
Los fantasmas de un 'Viverazo' empezaban a deambular por las gradas. Nudo en el estómago. Corazón encogido. Pero las gargantas seguían a tope de afinadas. Ahora más que nunca. Tocaba una remontada de ascenso.
El Badajoz quiso dar un paso al frente. Estaba obligado. El Amorebieta en su salsa. Ya lo avisaban desde todos los estamentos del club pacense. Es un rival duro, rocoso, complicado de meterle mano. Fiel al estilo vasco. Y con el marcador a favor, el más difícil todavía. El equipo de Estévez no encontraba esa frescura arriba que le ha caracterizado toda la temporada. Dani Fernández lo intentó desde lejos, pero se le marchó alto. Poco a poco, los pacenses se recuperaban del shock. Pero sin mordiente ni inquietar a Saizar. El Amorebieta repetía poco después su propio guion con un disparo de Unzueta que se marchó por encima del larguero. Con un quiero y no puedo y mucha impotencia blanquinegra acabó la primera parte.
Estévez tenía terapia en el vestuario. Momento de serenarse, aclarar ideas y no martillearse. Los jugadores tenían que resetear y tener claro que la llave de Segunda quedaba a un gol. Sin volverse locos.
Nada más reanudarse el encuentro, Kike Royo volvió a ser protagonista sacando una mano abajo a un obús de Larru. El Nuevo Vivero subía de tono. El humilde Amorebieta estaba a 40 minutos de hacer una gesta histórica para su localidad de 20.000 habitantes y de provocar un descalabro estrepitoso en Badajoz. Y es que la ilusión era enorme en la capital pacense. Lo tenía todo a favor. El campo, la ciudad volcada, la afición entregada y le valía el empate. Ese gol que no llegaba. Pero tampoco asomaba la cabeza por el área rival el Badajoz. Pasaban los minutos y se resistía esa ocasión que les enchufara de nuevo. En esos primeros compases Saizar solo hizo acto de presencia para volar por encima de los blanquinegros y sacar de puños casi en la frontal.
Estévez agitó la coctelera. Necesitaba buscar otra fórmula y dio entrada a Adilson y Otegui en lugar de Gorka y Jesús Clemente. Y en el primer balón que toca el extremo portugués puso al público en pie al asistir a Álex Corredera con posición de tiro en el punto de penalti. Y seguidamente el Nuevo Vivero reclamó un posible penalti sobre Corredera, tras recibir una 'tomasina' de esas típicas del lateral fuerte y con efecto, que el árbitro tuvo muy claro que se había dejado caer. Las protestas le costaron al Badajoz quedarse sin portero suplente porque el colegiado González Francés expulsó a Miguel Narváez.
Se calentó más el ambiente. El Badajoz apretaba los dientes. Se iba arriba con rabia. Pero chocaba una y otra vez contra un muro de hormigón armado. Eso le hacía conceder algunos fallos atrás que le pudieron costar caros a la contra.
La angustia le comía al Badajoz, que tenía a su rival encerrado en su campo. De los arreones de Adilson sobrevivían los pacenses. Y en un centro colgado de Álex Corredera la cabeceó César Morgado con todo su corazón blanquinegro pero se encontró con un Saizar sublime para sacar un puño imposible en un vuelo espectacular. Si lo había visto poco al portero del Amorebieta ahora lo iba a ver a base de bien. Estuvo inmenso. Colosal. El reloj apretaba aún más el partido. Y Sergi Maestre también tuvo la suya, pero se le fue rozando el poste.
Estévez se la jugó a la carta de Ernest Forgas. Íñigo Vélez, por su parte, a la inversa. Más traca para defender su tesoro de plata. La línea ya era de seis. Si durante todo el partido ya era difícil romper la tela de araña, a dos minutos de la gloria más difícil.
El Nuevo Vivero daba su aliento. Nadie se lo quería creer. El partido entraba en los cuatro minutos del descuento. Kike Royo subía a rematar las faltas. El portero se quedaba para el córner y remató un rechace que sacó la defensa bajo palos. En el siguiente saque de esquina de nuevo Kike asistía y Saizar de nuevo sacaba milagrosamente en la misma raya de gol. En la siguiente Kike Royo colgaba un centro que Forgas cabeceó muy blando a las manos del portero. El portero riojano en esos minutos de agonía fue el que más peligro creó de su equipo. Todo un síntoma de la impotencia blanquinegra.
El Badajoz murió a la heroica. Y el Amorebieta tomó el Nuevo Vivero. Estaba todo de su lado, pero la presión del favorito le pudo a las piernas de los jugadores. La tragedia blanquinegra. La Segunda tendrá que esperar otro año.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones de HOY
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.