El Badajoz busca técnico a ocho días del inicio de la liga

El CD Badajoz, al menos el de los últimos años con el retorno a Segunda B, se está convirtiendo en un club devorador de entrenadores. Son ya tres en menos de un año los inquilinos que ocuparán el banquillo local del Nuevo Vivero después de que ayer se anunciara que Pedro Munitis está muy cerca de cerrar su rescisión del contrato que le une a la entidad blanquinegra. A ocho días vista del arranque del campeonato liguero –el próximo domingo ante el Socuéllamos–, el Badajoz y su entrenador separan sus caminos apenas horas antes de la presentación del equipo y su esperanzador proyecto para alcanzar el fútbol profesional.

Pedro Munitis no se sentará hoy en el banquillo para dirigir a su tropa ante el Córdoba CF en el regreso, siete meses después, del fútbol con aficionados al Nuevo Vivero. El club comunicaba este sábado que su lugar lo ocupará el responsable de La Academia, José María Cidoncha. Mientras, el Badajoz se aventura a la caza de un nuevo preparador y son muchos los nombres que se están lanzando en redes sociales, desde Pablo Alfaro a Iván Ania hasta Estévez o Luis Carrión. Hay quien apunta al propio Nafti, técnico a quien sustituyó Munitis el pasado curso, pero el francotunecino ya ha encontrado acomodo precisamente en su país. Desde Juan Marrero, ninguno ha salvado una temporada completa.

La marcha de Pedro Munitis, aunque algo cruenta por la proximidad del inicio liguero o incluso la puesta de largo de esta tarde, no coge por sorpresa a un alto porcentaje de la exigente afición pacense, muy disgustada con la mala pretemporada que está desempeñando un equipo que se supone debe aspirar a todo. La derrota, y lo que es peor, la mala imagen ofrecida ante el Montijo de Marrero fueron la puntilla para el entrenador norteño, cuya crítica se hizo viral en redes sociales. Muchos incluso la esperaban antes y consideran que esta decisión llega tarde, con poco margen de maniobra para quien ocupe su puesto. Una tardanza que la convierte en más criticable, aunque será el tiempo quien juzgue si es acertada o no, un tiempo que esta temporada no permitirá el menor fallo desde el principio, dado lo ajustado del calendario.

Desde el club visten su marcha como un acuerdo mutuo, pero a nadie escapa que se trata de una destitución en toda regla pese a las llamadas a la calma y la confianza depositada en él por el dueño Joaquín Parra o los propios futbolistas. «Ambas partes han decidido que es la mejor decisión para el futuro tanto de la entidad como del entrenador. Desde el Badajoz agradecemos a Pedro Munitis su profesionalidad y su trabajo al frente del equipo en unos meses que han sido complicados para todos», reza el comunicado divulgado en la sobremesa.

Horas después, Joaquín Parra defendió en Radioestadio que la marcha de Munitis se debe a la «excesiva presión» generada en torno al equipo, una presión que ha podido con el ya extécnico albinegro y con quienes dirigen el club, que han velado por el «bien común de todos: entrenador, club y afición». Formalmente podría ser un acuerdo más que una destitución, pero de facto lo es.

Y a todo esto, este domingo hay partido. Y de los buenos, aunque no haya puntos en juego y sí el recuperado Trofeo Luis Bermejo. El Badajoz se presenta ante su hinchada en un amistoso ante el potente Córdoba (18.00 horas) con la imperiosa necesidad de despejar las dudas de los negativos choques de pretemporada, las mismas que han conducido al adiós del técnico. El Badajoz se hizo muy fuerte en virtud de la gran comunión con su público, ese que no ha dejado de apoyar y abonarse incluso con el peso de la incertidumbre actual, y esa comunión estabsa en jaque las últimas semanas a causa de las críticas al entrenador. De hecho, se esperaba que la cita ante el cuadro cordobés fuera un verdadero plebiscito. En lo meramente deportivo, una ocasión para ensamblar piezas pese al cambio en la hoja de ruta que se avecina.

Será el retorno de la afición al coliseo blanquinegro más de medio año después debido a una pandemia que ha trastocado los planes de cualquier actividad, también el fútbol. Las medidas sanitarias obligan a una restricción de aforo, pero el club ha conseguido ampliar la limitación incial de 1.500 y propiciar que sus abonados adultos puedan regresar al Nuevo Vivero siete meses después, para ello ha tenido que sacrificar como medida excepcional en este amitoso de presentación a los abonados infantiles. Todo un éxito en la gestión del club dada la situación actual. Es obligado permanecer con la mascarilla puesta todo el partido, no desplazarse ni ponerse en pie, ni comer o fumar. Además, hay que entregar en la entrada el formulario de localización, el acceso al estadio será segmentado por zonas y horarios y no se podrá abandonar antes de que finalice. Solo podrán entrar los abonos de tipo adulto, habrá control de temperatura, desinfección de manos, etc. Buena ocasión para dar ejemplo desde Badajoz al resto de España.