El Badajoz cae en la trampa del Socuéllamos

El Badajoz sabía que sobre el coqueto tapete del Paquito Giménez le aguardaba una emboscada y cuando todo parecía que iba a salir victorioso del campo de batalla recibió un ataque sorpresa para dejarse dos puntos muy valiosos sobre la hierba sintética. Los blanquinegros sienten de esta forma postrera que han perdido una batalla, pero no la guerra que les lleve a las tres plazas del playoff de ascenso a Segunda. Socuéllamos solo era el principio de 18 finales. Pepe Delgado, en el suspiro final, evitó la victoria del Badajoz en el duelo inaugural contra el recién ascendido Socuéllamos (1-1). El equipo pacense logró adelantarse en el marcador del Paquito Giménez mediante una jugada individual de Álex Corredera culminada con un sobresaliente zurdazo, pero no fue capaz de administrar la ventaja hasta el pitido final.

Hubo reparto de puntos de forma agónica en la inauguración del nuevo camino hacia Segunda División y, por el momento, con José María Cidoncha como entrenador interino tras la marcha de Pedro Munitis. Las expectativas compartidas en la previa del partido por el propio técnico pacense sobre el tipo de juego que se exhibiría en un terreno de juego de césped artificial como el Paquito Giménez se confirmaron desde el pitido inicial del colegiado aragonés Aranda Anquela. El preparador visitante calificó de batalla el espectáculo en el que se iban a ver inmersos sus discípulos horas después, y la sangre desprendida por la nariz del joven Jesús Clemente a los cinco minutos de juego supuso un aviso de que, efectivamente, la intensidad y el contacto físico imperarían en todo momento sobre el feudo socuellamino, de nuevo de Segunda B.

La igualdad se mantuvo durante el primer tramo del encuentro con dos escuadras que demostraron tener las ideas claras a base de buscar el juego directo, las segundas acciones, y colgar balones al área que pudiesen dar la opción de sembrar dudas en la defensa y el portero rival. A base de insistencia, el visitante Alayeto dispuso de la primera oportunidad de gol al encontrarse con un balón muerto en la frontal del área que envió un par de metros por encima de la portería defendida por Javi Sánchez. Sin embargo, la respuesta del Socuéllamos no tardó en llegar, y lo hizo por partida doble. Primero, un cabezazo de Antonio Megías obligó al guardameta Kike Royo a emplearse a fondo, si bien el árbitro asistente ya había levantado el banderín por fuera de juego. La segunda, sin observaciones arbitrales, fue un chut de Fran Santano que salió ligeramente desviado. Con estos dos avisos del combinado local, se llegó al descanso en el Paquito Giménez. El paso por los vestuarios no frenó el impetuoso ritmo del Socuéllamos, que, al poco tiempo de cumplirse el primer minuto del segundo acto, consiguió avisar nuevamente a Kike Royo mediante un remate de Fran Santano.

Las dificultades con las que se encontró el Badajoz para hilvanar jugadas a través de fútbol combinativo fueron enormes ante la adversidad del terreno de juego sintético y, además, el buen planteamiento defensivo del bloque blanquiazul. Sin embargo, los buenos jugadores pueden desnivelar la balanza en cualquier momento, y así lo hizo el visitante Álex Corredera. Con una sensacional jugada en solitario, arrancando en el carril derecho y trazando una diagonal con la pelota siempre pegada al pie, consiguió zafarse de tres defensores y plantarse en la frontal del área para batir a Javi Sánchez con un zurdazo imparable, y, de esta forma, adelantar al Badajoz en el marcador en el minuto 61.

Tras el tanto de tan bella factura del futbolista catalán, el contexto del encuentro varió radicalmente, pues el equipo de José María Cidoncha ya no sintió la necesidad de buscar ataque con balón y optó por ordenarse para administrar la ventaja sobre el complicado escenario manchego. Por su parte, el Socuéllamos trató de inquietar a Kike Royo recurriendo a centros laterales, pero el entramado defensivo del Badajoz se mantuvo firme y apenas concedió peligro hasta que, poco antes de anunciar el delegado de campo el número de minutos de tiempo añadido, apareció Pepe Delgado, que con una espectacular volea desde la frontal del área, estableció la igualada en el suspiro final para rescatar un punto y endulzar la puesta de largo del recién ascendido Socuéllamos. Una estrategia de la que había avisado Cidoncha en la previa, pero ante la que nada se pudo hacer por la perfecta ejecución del bombardero Delgado.

En medio de la euforia socuellamina por el tanto postrero y de la decepción pacense al escaparse el triunfo en el minuto 90, hubo un punto para cada equipo en el estreno dentro del subgrupo 5B.