El colíder visita el Nuevo Vivero

Justo un cuarto de siglo después del partido inolvidable que supuso el ascenso a Segunda A, el CD Badajoz vuelve a enfrentarse al Cartagena. En aquella ocasión la afición fue imprescindible y este domingo la plantilla también necesita el apoyo de los suyos, que se han convertido ya en el jugador número doce. En cada intervención ante la prensa, el técnico del Badajoz, Juan Marrero, se refiere a que sus pupilos cuentan con el incondicional apoyo de una hinchada que hasta la fecha está teniendo un comportamiento muy positivo hacia el plantel. «Jugamos en nuestra casa, delante de nuestra afición con el plus que eso supone, y tenemos que ganar el partido. Por obligación, porque estamos en zona peligrosa y por darle una alegría a nuestra afición», significaba el viernes.

Además, no llega cualquiera al coliseo albinegro. Lo hace el colíder del grupo IV con los mismos puntos que el vecino Extremadura. Una potente escuadra la del Cartagena entrenada por un viejo conocido del feudo pacense, Alberto Monteagudo, quien esta semana en este diario vaticinaba que su oponente de esta tarde no tendrá problemas para salvarse.

Marrero afirma que hay que olvidar lo sucedido en Jumilla, donde el equipo vio frenada su buena marcha. «Hay que aprender de los errores. Este partido será distinto, por el campo, por el rival, por dimensiones y por ambiente. Nos tenemos que transformar y poner en liza todas nuestras armas. Tenemos que estar al 200 % para poder competir. Quiero que haya motivación pero no miedo. La liga está demostrando que cualquiera puede ganar a cualquiera».

El Badajoz suma varias bajas para este encuentro. Además de Diakité, se caen de la lista Morante (cuadriceps), Rafa García (fractura del segundo metatarsiano) y Buben (tendinopatía en el psoas). Recupera a Javi Rey, Guzmán, Eloy, Néstor y Chechu. El parte de bajas del Cartagena es casi peor, ya que no contará con el meta Pau Torres ni con su ariete Aketxe, además de los defensas Jesús Álvaro y Óscar Ramírez.