Vuelven las colas al Nuevo Vivero

La locura por el Badajoz está alcanzando niveles insospechados. Nada más conocerse el rival en el sorteo del lunes ya había aficionados montando guardia en el Nuevo Vivero para conseguir la codiciada entrada para un partido histórico. Sin saber si quiera cuándo el club pacense abriría las taquillas. El primero en llegar fue Cristófer Ayuso, en realidad su madre porque se van relevando. «Tenía pensado venir más tarde, pero mi padre y mi hermano se quedaron sin entradas para el Zamora y mi madre vino a hacer cola. Nos vamos turnando y yo haré las noches», explica. Este aficionado montó su tienda campaña junto a la taquilla y a esperar equipado con sillas, ropa de abrigo, nevera y saco de dormir. Como mínimo pasará dos noches porque el Badajoz anunciaba por la tarde que al menos hasta el miércoles no se pondrían a la venta las entradas. «Dormir en el suelo es un tanto fastidioso y hacía bastante frío por la noche», cuenta Cristófer Ayuso.

Inocente Jiménez, conocido como 'Líder', es uno de los seguidores más carismáticos del equipo blanquinegro y llegó a las 14.30 horas. El cuarto en el orden de fila. 'Líder' lleva la lista para organizarse y evitar que se cuele la gente cuando se abran las taquillas. «Aquí estamos para ver a nuestro Badajoz que es lo más grande», comenta sonriente a pesar de la noche fría pasada. Todo lo que sea llevar al Badajoz a Segunda. «Lo importante es subir y esto quede como una anécdota. Que el equipo se sienta apoyado desde el primer momento», destaca Cristófer.

La pasión por el Badajoz se multiplica en las grandes citas. «Ahora se apunta todo el mundo», se queja Antonio Vázquez. Y cada vez se adelanta más las horas para instalar el campamento junto al estadio. «Estamos impacientes por una entrada», reconoce Cristófer Ayuso. A media mañana del martes ya había unas 120 personas apuntadas en la libreta de 'Líder'. Y casi todas para apurar las 4 entradas por persona que se permitía retirar en la primera eliminatoria en el Francisco de la Hera ante el Zamora. «El Badajoz lo sientes o no lo sientes», apunta Antonio Vázquez, que fue responsable de márketing en la época de Ambición Blanquinegra.

El Badajoz todavía no sabe de cuántas entradas podrá disponer ni del aforo que se permitirá para la final ante el Amorebieta. «No sabemos nada, a ver si dejan el 75 por ciento», expone Inocente Jiménez. Incluso puede que en función del reparto de la Federación Española al final todos los abonados tengan asegurada su entrada. Pero ni aún así impide el deseo por lograr una de las entradas. «Como no sabemos nada claro no queda otra que esperar», sostiene el primero de la fila, quien remarca que en cualquier caso estar allí «merece la pena y por lo menos el equipo sabe que tenemos muchas ganas de entrar en el estadio y apoyarles». En las próximas horas el club pacense informará sobre el proceso de venta de localidades. «Los abonados tienen que ser los primeros. Tenían que hacer como en la Copa, poner un plazo hasta el viernes y las que sobren que se pongan a la venta para el público«, sugiere 'Líder'.