«Habría estado encantado de jugar en el Nuevo Vivero»

Iba a ser el foco de atención de manera irremediable, pero se ha visto sin esperarlo en medio de un fuego cruzado entre Badajoz y Arroyo que le ha pillado en Logroño enterrando a su suegra. Desde el mismo tanatorio de la capital riojana atiende a este periódico soprendido por el revuelo que se ha montado en relación al traslado del partido a Olivenza. Adolfo Muñoz vuelve a cruzarse con su exequipo al frente de un Arroyo al que ha metido la directa y como seria amenaza para acabar con la condición de invicto de los blanquinegros. Quizás este partido tan especial y exigente le llega antes de lo deseado para que su equipo asimile sus conceptos, pues apenas lleva tres semanas de entrenamientos y este jueves se ha encontrado con un amistoso fijado previamente ante la selección extremeña. Pero su mano se ha hecho notar y asusta con nueve goles en los dos encuentros que ha dirigido.

Se ha resistido, pero otra vez de vuelta a los banquillos.

La verdad que muy contento. Ha habido otras opciones de entrenar antes, pero no se daban las circunstancias de lo que quería. Ahora el Arroyo se ha interesado para que entrene allí y estoy muy agradecido.

De nuevo al frente de un equipo con aspiraciones de ascenso.

Cuando llegué, Juan Bermejo me lo puso claro y la opción es esa. Sabemos de la dificultad, pero vamos a darlo todo por volver otra vez a la categoría de bronce.

Y a las primeras de cambio el Badajoz se cruza en su camino.

Todo el mundo sabe el amor que le tengo al Badajoz. El Badajoz me dio mucho como jugador y como entrenador y le estoy muy agradecido. Nadie puede dudar del amor que le tengo y además soy socio desde hace tiempo, incluso este año. Pero ahora me debo al Arroyo, es el equipo que me ha contratado y voy a hacer lo posible por meterlo donde merece. Ahora todo mi trabajo y esfuerzo están enfocados a cumplir los objetivos con todas las dificultades que hay.

El partido llega con polémica entre los clubes por su emplazamiento en Olivenza y el Badajoz le señala como el responsable de la negativa del Arroyo.

He sufrido una situación personal que me ha mantenido al margen de todo. Estos días hemos estado muy pendientes del estado de salud de mi suegra, a quien estaba muy unido, y desgraciadamente este martes ha fallecido. El lunes nos fuimos a Logroño y casi ni llegamos a verla. No he tenido tiempo ni de saber nada. Son acuerdos a los que tienen que llegar los clubes. El impedimento mayor era no poder jugar en el Nuevo Vivero y no hay que darle más vueltas.

¿Le habría gustado reencontrarse con el Nuevo Vivero?

Por supuesto. Habría estado encantado, pero no ha podido ser y tenemos que afrontar el partido de la mejor manera. El escenario también es bueno. Ese partido es atractivo, espero que se vea un buen día de fútbol y los dos equipos compitan. Luego al que gane, felicitarle y ya está.

¿Teme que esto empañe su relación con la afición blanquinegra?

Pienso que no porque la gente me conoce y sabe lo que yo quiero al Badajoz. Eso no me lo va a quitar nadie. Sé que la afición del Badajoz entiende la situación. No hay que buscar ningún culpable. El problema es que no se ha podido jugar en el Nuevo Vivero y buscar un culpable creo que ha sido un error.

¿Habría preferido que se aplazara el partido para volver a pisar el estadio al que tantas alegrías dio?

Yo encantado. Volver a ver a esa gente que disfrutó tanto con el equipo que tuvimos y volver a ver esas caras con las que he convivido dos años me hubiera alegrado mucho. A esa afición la respeto mucho y le tengo un gran cariño. Lo más importante del club son sus aficionados. Los demás estamos de paso.

¿Al Arroyo le viene mejor visitar al Badajoz en Olivenza que en el Nuevo Vivero?

Es un campo más. Tiene buenas dimensiones. Lo único que quiero es que se vea un buen partido, que la afición disfrute y nada más. Me centro en mi equipo. Estoy muy contento, tengo un grupo humano espléndido y a ver si soy capaz de sacarle el máximo partido. Mi preocupación ahora es que ante un equipo que ha estado intratable toda la liga ver si somos capaces de competir y ponerle las cosas difíciles.

Desde su llegada el Arroyo se ha transformado y asusta, ¿qué ha cambiado?

El mérito es de los jugadores. Son los verdaderos protagonistas. Están muy comprometidos y muy receptivos. El grupo humano es formidable y lo que intento es ponerle el modelo que quiero. Estoy muy contento con el trabajo diario y espero sacarle el mayor rendimiento a cada uno. El partido ante el Badajoz es una gran prueba para nosotros. Tengo una gran fe en esta plantilla. Los partidos se han iniciado ganando y eso facilita las cosas. Pero el equipo está lejos de lo que quiero. Confío en el margen de mejora.

¿Ve al Arroyo como una alternativa a Extremadura y Badajoz por el título o arranca demasiado lejos?

Son muchos puntos los que nos distancian de ellos, pero lo que a mí me interesa es el día a día. Ver a los jugadores crecer, que cada día den un rendimiento mayor, que el equipo mejore y a partir de ahí ir sumando puntos y cogiendo confianza, ya dirá el calendario dónde llegamos.

Hace unas semanas el Badajoz parecía un cohete y el Arroyo iba a pedales, pero ahora la dinámica es otra y se enfrentan con sensaciones diferentes.

Llevamos una racha de tres partidos sumado. Se ha competido y ganado bien, pero el Badajoz lleva todo el año sin perder un partido. Eso quiere decir que es un equipo muy fuerte y que será muy complicado. Las estadísticas están ahí y reflejan que el Badajoz es un equipo favorito para el ascenso.

El destino le puede colocar como el primer verdugo de este Badajoz.

A mí lo que me interesa es que mi equipo compita. El partido es muy importante para el Badajoz y para nosotros en el sentido de seguir en la dinámica buena. Pero lo veo como un partido más, no por el condicionante que tiene, pero sí en que los tres puntos son iguales que la semana pasada contra el Fuente de Cantos. Vamos a intentar hacer lo posible por sumarlos. Confío en mi plantilla y que va a estar a la altura, por esfuerzo y ganas no va a a quedar.

¿Cómo ve al Badajoz?

Lo veo muy bien. Lo he seguido todo el año. Cero que tiene un equipo que está jugando bien al fútbol, que compite muy bien, con muchas alternativas y De Paula está haciendo un gran trabajo. Es un equipo muy fiable. Sabemos que el año es muy largo y hay altibajos, pero el Badajoz tiene una plantilla muy buena y está compitiendo muy bien.

Curiosamente, protagoniza un duelo de banquillos con quien contaba para ser su segundo la campaña pasada en el Badajoz tras la destitución de Víctor López.

Son cosas que pasan en el fútbol. Las elecciones se hacen y tuve la opción cuando entró Pastelero. El Badajoz ha hecho una elección muy buena que es la de De Paula y le deseo lo mejor porque es un buen entrenador y buena persona. Le deseo al Badajoz que gane todos los partidos menos el nuestro, claro.

Ha estado en varias ocasiones a punto de volver al Badajoz como entrenador, pero al final no fructificaron, ¿se ve en una nueva etapa en el banquillo blanquinegro?

Ahora me debo al Arroyo, quiero triunfar en el Arroyo. Estoy muy a gusto y cumplir los objetivos. El Badajoz es un equipo que nadie puede rechazar. Pero ahora quiero devolverle al Arroyo la confianza que me ha dado. Toda mi atención está en el Arroyo ahora mismo.