El Badajoz amaina la tormenta

El Badajoz tendrá una semana tranquila tras varias jornadas de tormenta. Hizo valer el factor campo para cosechar los tres puntos ante un Don Benito que presentó batalla y puso nerviosa a la hinchada -asustada por un 2-2 que veía factible- pero al que logra alejar en la clasificación con vistas a la cuarta plaza. El colchón ahora es de siete puntos, lo que da aire ante la inminente salida a Almendralejo. Sufrida victoria de un cuadro blanquinegro castigado por esa mezcla de infortunio e incapacidad en el acierto, siempre vital en el fútbol. Este domingo, la mala suerte incidió también sobre la zaga cuando un rebote sobre Jesús Muñoz permitió a los de las Vegas Altas irse al descanso con un 1-1 tal vez inmerecido. Tras la reanudación, muy pronto Chechu recondujo el electrónico pero después el Badajoz no supo administrar su ventaja y se disipó ante un Don Benito que buscó la igualada hasta el último suspiro.

Pocas sorpresas en la alineación local. Lo previsto por alguna ausencia en el centro del campo, con Edu Torres y Rober en el centro, apoyados algo más arriba por Pozo y la entrada de Jairo Caballero, se suponía que en el extremo zurdo, con Javichu por detrás en el lateral, aunque se dirigió al flanco derecho con Adri al otro lado del campo. En los visitantes se confirmaba la no presencia de Garretas, la principal duda de Sosa.

Adri protagonizó el primer acercamiento blanquinegro tras una buena internada con centro desde la derecha de Rober, pero no acierta en el remate sin dejarla caer. Primeros compases de gran igualdad y mucho respeto por ambos contendientes. El Don Benito, bien posicionado, sabía frenar los primeros escarceos pacenses pero sin perder la mirada en el arco contrario, demostrando por qué se ha sumado a la pugna por las cuatro primeras plazas.

Al Badajoz le costaba entrar en ritmo. Algún cabezazo sin mordiente de Carreño y poco más, hasta que en el minuto 19 Adri desatascaba un encuentro que parecía dormirse. Buena combinación desde la banda diestra y Adri aprovecha un rechace para batir cruzado a Sosa y anotar el 1-0. Contestaría acto seguido Isidro por los dombenitenses, pero su testarazo fue repelido por Arenas.

Sin ser dueño absoluto del choque, los de Agustín Izquierdo fueron creciendo con el paso de los minutos. El Don Benito dejaba más espacio y Abraham Pozo comenzaba a pasear su zurda. Fueron varias las aproximaciones sin que el guardameta rojiblanco tuviera que emplearse a fondo. En la recta final del primer acto la mala suerte que acompaña a los inquilinos del Nuevo Vivero en este 2016 salió a escena. Cuando todo indicaba que se llegaría al descanso con la ventaja local, el cemtral Jesús Muñoz enviaba el balón a la red en una jugada tonta de rebote en la que Arenas nada pudo hacer. Los dombenitenses se marchaban al vestuario con una igualdad en el marcador que no se esperaban. El infortunio atosiga a los albinegros, y esta vez no sólo en la meta contraria sino en la propia.

Por eso salieron enrabietados tras la reanudación. El viento, que había dado una tregua en la primera parte, comenzó a soplar con fuerza, la misma de un Badajoz que estrechaba el cerco al rival y que muy pronto vería recompensada su mayor ambición. Chechu, en un saque de esquina, aprovecha con su remate de cabeza la falta de entendimiento de la zaga dombenitense para volver a dar ventaja a los suyos. Muy pronto el técnico Sosa mueve ficha e introduce en el campo a Kiko, al que sitúa en la medular sentando a Nono. Patri lo intentaría de cabeza en un buen centro de Lolo para decirle a la grada que el Don Benito también compareció, pero su testarazo se marchó desviado. Óscar lo intentaría en una buena ocasión que fue anulada por el linier. Los visitantes apretaban y los nervios contagiaban la grada. Y más cuando Kiko ejecuta un saque de esquina que casi se convierte en gol olímpico entre el golpeo y el vendaval. Eran los peores minutos del Badajoz.

Izquierdo mira al banquillo y cree que Lolo puede ser el revulsivo ante la desaparición de su equipo. Sustituiría a un Carreño que no tiene el acierto del primer tramo de liga. Poco después sería Juanito quien entrara por Abraham Pozo. Por los visitantes, Cristian lo hacía por Lolo, que justo antes lanzaba alto desde muy lejos. Faltaban 15 minutos y muchas incógnitas. El Badajoz estaba atenazado, incapaz de tener la pelota y organizar algo de fútbol. Izquierdo, que de haber tenido cinco cambios los hubiera hecho todos, llama a Copito, también sabedor de que el capitán puede resolver partidos de agónico e incierto final. Corría el minuto 83 y poco antes Edu Torres firmaba un colosal disparo que por centímetros no se cuela por la escuadra, impactando violentamente contra la parte alta del poste izquierdo de Sosa. Ya se sabe que la suerte le es esquiva al Badajoz.

El Don Benito quemó naves y el Badajoz comenzó a encontrar autopistas. Copito pudo cerrar el encuentro en el 87 y Lolo en el 88, pero seguía muy abierto. También Muñoz con un remate de cabeza. Y otra vez Lolo en el 90, pero el gol está reñido con los blanquinegros, que finalmente se adjudicaron un sufrido triunfo ante un rival que se presentaba en el Nuevo Vivero como directo pero al que aleja a siete puntos.