Copito prepara su despedida

iempre dejó claro que sería él mismo quien pusiera fecha a su retirada y que tendría la despedida que quisiera. Y ha decidido que ha llegado el momento. Copito anunciará este miércoles que colgará las botas a final de temporada. Lo adelanta ahora, antes de que su equipo se adentre en la fase de ascenso y evitar así que cualquier otro asunto pueda distraer del objetivo donde deben centrar todos los sentidos. El lunes soplaba 38 velas en el que será su último cumpleaños como blanquinegro y espera hacer realidad sus mejores deseos con otro 'picotazo' en una fase de ascenso que sirva de epílogo a una dilatada trayectoria marcada por su idilio con el gol.

La decisión que ha tomado David Gascón Cordero (Madrid, 1978) la llevaba meditando desde este verano y después de una temporada complicada por las lesiones ha madurado para poner fin a una extensa carrera que le llevó a saborear la Segunda con el CP Mérida de Paco Herrera y el Getafe y acariciar la Primera con el Villarreal con el que llegó a jugar un amistoso en París ante el PSG, pero que las lesiones le privaron de debutar en partido oficial.

Cada vez que surgían comentarios sobre su edad y desde algunos sectores se empeñaban en anticipar su retirada, el goleador blanquinegro demostraba sentirse como un canterano y se autoimponía su fecha de caducidad. «No voy a estar por los campos arrastrándome. Antes de que me echen seré yo quien dé el paso atrás», repitió en varias ocasiones hace dos años. Y así ha sido. Esa pasada temporada calló muchas bocas con sus 20 goles (19 en Tercera y 1 en la fase ascenso en Murcia) y a pesar de perderse gran parte de la segunda vuelta ser capaz de disputarle el pichichi a Jesús Perera. El capitán blanquinegro dejará este verano un legado mucho más rico que sus -por ahora- 114 goles. Copito es emblema y la razón de ser del refundado Badajoz. Su compromiso y papel como icono del club traspasa el vestuario del Nuevo Vivero.

Mediático en la tierra

El delantero de Torre de Miguel Sesmero apostó desde el origen por una aventura desconocida por los campos de tierra de Primera Regional y acabó siendo objetivo de los flashes de todos los medios nacionales. Llegaron los goles y los ascensos con los que devolvió al Badajoz a Tercera. Su aportación al Badajoz en estos cuatro años va más allá de los terrenos de juego y los 114 goles de blanquinegro con los que rebasó la cifra histórica de Rafa Pozo. Es el santo y seña de una afición que se ganó a base de implicación y un sentimiento profundo por los colores blanquinegros. Copito es ya una leyenda blanquinegra y se marchará este verano dejando al equipo pacense en su segunda fase de ascenso a Segunda B consecutiva y quien sabe si con el colofón de un tercer ascenso. Desde que se embarcó en Primera Regional, ha marcado en todas las eliminatorias de ascenso y por delante le queda un último desafío para despedirse con otro de sus 'picotazos', su sello. Sería poner la rubrica con los honores que se merece.

Retirado en 2011 por riesgo de infarto cerebral, en el Badajoz recuperó la ilusión y el fútbol rehabilitaba a uno de sus activos. El capitán blanquinegro se despedirá a sus 38 años tras una temporada complicada por las lesiones y que empezó sin apenas contar para Óscar de Paula. Copito se ganó la renovación tras marcar 20 goles la pasada campaña y disputarle el pichichi de la Tercera a Jesús Perera. A pesar de las escasas oportunidades y no disputar ninguno de sus 12 partidos de titular con apenas 206 minutos de juego, el goleador de Torre de Miguel Sesmero lleva anotados 5 tantos este curso, algunos decisivos como el de la victoria ante el Azuaga.

Ahora su salida natural sería seguir ligado al club. Por lo que significa su figura y su perfil la directiva debería lanzarle el guante.