El Badajoz, con la cabeza en Las Rozas

El Badajoz tiene la cabeza puesta en Las Rozas. Esta tarde se celebra el sorteo de la fase de ascenso en la Ciudad del Fútbol y era difícil abstraerse. Pero los blanquinegros resolvieron bien una cita sin alicientes y que el Pueblonuevo les exigió al máximo. La primera parte tuvo un pase porque ambos contendientes velaron armas para la batalla y por los goles, que en definitiva son la salsa del fútbol, pero la segunda sobró. Sin más.

Agustín Izquierdo no quería que este intrascendente partido fuera un mero trámite y no dio lugar a experimentos. Ni siquiera para tener un guiño con Copito y que el capitán se despidiera de la Tercera siendo por primera vez titular esta temporada. La única licencia que se permitió fue reservar a Parada ante el peligro de cumplir ciclo de tarjetas y dar minutos al portero Isi Jareño con el fin de tenerle preparado por lo que pueda pasar en la parte decisiva. Toda precaución es poca para afrontar con garantías la fase de ascenso. La otra ausencia destacada en el once fue la de Kiko debido a unas molestias que le han impedido entrenar toda la semana. El preparador blanquinegro lo ha venido repitiendo esta semana hasta hartarse para mentalizar a sus jugadores, quien no entregue el máximo sale del equipo en la fase de ascenso. Se tomó la visita del Pueblonuevo como un ensayo general y aunque la intensidad no podía ser la misma que con algo en juego los jugadores respondieron a las directrices del banquillo.

Lejos de desperdiciarse desde el primer minuto como un partido descafeinado, por momentos pareció calentarse en exceso. Apretaba el Pueblonuevo y en parte, porque no hubo que lamentar lesionados, esa exigencia a la que le sometía la agradecía el Badajoz por lo que le espera de aquí en adelante. Los de Antonio Castaño no venían de fiesta al Nuevo Vivero una vez certificada la mejor temporada de su historia y buscaron su oportunidad. Pudo llegar en un remate de cabeza de Folleco tras un saque de esquina que se marchó ligeramente desviado. Le costó al Badajoz despojarse de ese pegajoso tejido táctico que le planteó su rival. Con una línea de cinco atrás y un centro del campo minado, los blanquinegros se encontraron enjaulados sin poder desplegar esa alegría en el juego e imprimir un mayor ritmo a su ataque. Tampoco pudo aprovechar la baza de la velocidad de Adri o Álex González.

El Pueblonuevo pudo comprobar que tiene un vecino no tan adorable. Abraham Pozo lo intentó sin descanso y encontró el premio con un golazo de falta directa que había sufrido él mismo en el vértice del área. El de Pueblonuevo no tuvo compasión de sus paisanos y liberaba al Badajoz de sus cadenas. El poco trabajo que había tenido en esa primera media hora el ex portero blanquinegro Isaac había nacido de las botas de Abraham Pozo.

El equipo de Agustín Izquierdo encarrilaría el encuentro con otro tanto de Carreño al transformar un penalti cometido por agarrón a Germán Rojas dentro del área. Ahí, al filo del descanso, se acabó el partido.

Copito, a punto de marcar

La segunda parte perdió todo el interés y se convirtió en un aburrido suplicio. El técnico blanquinegro refrescó al equipo dando entrada a Lolo y Copete y su homólogo visitante Castaño también metió al escurridizo Jaime y Sito, ovacionado por el Nuevo Vivero, sus dos únicos hombres de campo, pues el Pueblonuevo sólo presentó tres suplentes. Pero estos cambios tampoco rompieron la monotonía, a pesar de que Izquierdo se afanaba en dar indicaciones desde la banda para mantener las pulsaciones a cien en sus futbolistas. A medida que pasaban los minutos, la grada pedía a Copito en un deseo de encontrar algún atractivo con el que entretenerse y animarse. Salió al ídolo y símbolo blanquinegro y al minuto pudo poner al Nuevo Vivero en pie con otro de sus 'picotazos' que Cantos sacó sobre la misma línea. Copete peleó con ahínco el balón con Isaac, el rechace le llegó al capitán blanquinegro que viendo al portero fuera de su marco levantó la bola para hacer diana, pero el central del Pueblonuevo impidió sobre la raya que el mito agrandara su leyenda. Apenas dos minutos después tuvo otra, de nuevo en otro robo del incansable Copete, pero Copito se resbaló cuando armaba la maniobra de disparo.

De la segunda parte se salva la concentración y que al menos sirvió a Agustín Izquierdo para comprobar que Isi Jareño está metido también en la dinámica del equipo. El portero pacense sacó ya con el tiempo cumplido una mano espectacular a Folleco en un remate seco.

El Badajoz ya vela armas para intentar su segundo intento a Segunda B. A partir de las 17.30 horas, primer asalto.