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¿Qué ha pasado hoy, 14 de marzo, en Extremadura?
Kike Márquez (Extremadura), Alberto Delgado (Cacereño), José Ángel (Villanovense) y Guzmán Casaseca (Badajoz).
El miedo controlado de los futbolistas

El miedo controlado de los futbolistas

Los capitanes de Extremadura, Badajoz, Cacereño y Villanovense quieren volver pero con garantías de seguridad y sin desatender a otros colectivos más necesarios

Sábado, 25 de abril 2020, 08:46

El fútbol encabeza el podio de lo no imprescindible. Es más 'necesario' en comparación a otros bienes no de primera necesidad y tiene gran importancia incluso en el PIB del país (1,37%), pero no a cualquier precio. En nuestra comunidad, como ocurre en el resto de España, los futbolistas –aunque hay excepciones– están deseando regresar a los terrenos de juego, pero solicitan ciertas garantías sanitarias –conscientes de que el riesgo cero no existe– y que sus cuidados médicos, los famosos test, no interfieran en la desatención de otros colectivos que sí están en la primera línea de batalla contra el COVID-19. Este diario ha consultado a capitanes y pesos pesados de Extremadura (su segundo), Badajoz, Cacereño y Villanovense, que podrían regresar al césped en verano arriesgando la salud para culminar sus temporadas en caso de que el Gobierno dé luz verde. Los cuatro coinciden en que, por suerte para ellos, será el Ministerio de Sanidad y no LaLiga o la FEF quien tenga la última palabra de este dilema, por encima de intereses económicos o clasificatorios.

Extremadura, Kike Márquez

En el Extremadura tienen claro que en estos momentos se debe anteponer la cautela, y sobre todo la seguridad, a la opción de jugar al fútbol en las próximas semanas. El capitán Gio Zarfino ya ha expresado este deseo en varias ocasiones, y ahora otro de los capitanes del equipo, Kike Márquez, se une a la petición de que no se juegue cuando ha habido tantos muertos en España por el coronavirus. «El fúbol no debería tener la importancia que se le está dando. A nivel económico al país le pueda dar mucho, porque el fútbol genera mucho dinero, pero hay que hacerse la pregunta de si vale más ese dinero que esas miles de personas que están muriendo. Eso me lo pregunto muchas veces. Además, jugar en un mes de julio en Extremadura puede causar otros problemas en los propios futbolistas», sentencia Márquez.

«Hay que hacerse la pregunta de si vale más ese dinero que esas miles de personas que están muriendo. Yo me la hago»

kike márquez, extremadura ud

«Mi familia es lo primero, pero estoy convencido de que cuando nos manden a jugar será porque el riesgo es mínimo»

guzmán casaseca, cd badajoz

«Lo primero es la salud y hasta que no esté garantizada no hay que tener prisas. Más vale esperar un poco más»

Alberto Delgado, Cacereño

«Los compañeros hemos decidido que, si no hay ingresos, jugaríamos sin cobrar en junio, julio o agosto, aunque tengamos que hacer un esfuerzo»

José Ángel, Villanovense

El atacante del Extremadura aclara que su visión actual del problema no está influenciada por cómo va el equipo en liga, sino por la mala situación que están pasando muchas familias en el país: «Hay demagogia en que miramos también la clasificación y, sinceramente, me parece absurdo que se piense de esa manera. No somos conscientes de la pérdida de muchísimas familias, por lo que no hay que pensar en la clasificación y lo que le viene bien a unos o a otros. Hay muchas pérdidas que hasta que no tenemos en primera persona no nos damos cuenta del riesgo que estamos tomando si a día de hoy se reanuda la liga».

Además, Kike Márquez también defiende al defensa del Cádiz Fali, que cree que no se debería reanudar la competición. «Han dado mucho que hablar las declaraciones de Fali y yo lo entiendo. Igual utilizó palabras no adecuadas o un poco exagerado todo, pero es la realidad de lo que estamos viviendo a día de hoy. Primero hay que ayudar a esa gente que está en primera línea luchando por esta batalla, porque son los importantes, y no los futbolistas. Los héroes son ellos y son los que pueden conseguir que el fútbol vuelva cuanto antes, no nosotros», sentencia Kike Márquez según informa Raúl Peña.

Badajoz, Guzmán Casaseca

El capitán del CD Badajoz se califica como una persona «positiva» y quiere entender que se verá luz al final del túnel, pero considera que existen demasiadas complicaciones. «Esto es un lío tremendo y es imposible ponerse de acuerdo y que todo el mundo esté contento. A día de hoy todavía no se saben muchas cosas y es hablar por hablar, pero sí tengo claro que quien tiene que decidir es el Gobierno y debe velar por la salud de todos. Además, tendrán que ofrecer ayudas porque muchos clubes humildes no se pueden permitir las cosas de los de Primera y Segunda. Nosotros estamos deseando volver, pero ahora toca esperar a hacerlo en las mejores condiciones».

Guzmán Casaseca, que recientemente renovó como blanquinegro, comenta que en el vestuario se habla del miedo al contagio en caso de regreso, pero afirma que nadie en el plantel haya mencionado que se niegue a hacerlo, además de que «nosotros somos los que más protegidos vamos a estar. Estoy convencido de que cuando vuelva la competición será con todas las garantías del mundo. No se van a arriesgar a exponer ni a los futbolistas ni a nadie. Volveremos con todos los protocolos posibles para que no nos podamos contagiar. Yo tengo mi familia y es lo primero, pero estoy convencido de que cuando nos manden a jugar será porque el riesgo es mínimo. Es pronto todavía y hay que ver cómo evoluciona todo, pero puede que dentro de más de un mes haya test para todos. Tarde lo que tarde, pero que volvamos con seguridad, porque lo primero es lo primero y yo no voy a poner en riesgo a mi familia».

El capitán ve intereses económicos en las grandes categorías y cierto olvido en el fútbol más modesto, pero le tranquiliza pensar que será el Gobierno quien decrete la hoja de ruta. «No será LaLiga o la Federación movidos por sus intereses, sino el Gobierno, y lo hará en función de la salud», subraya Guzmán, que se siente en todo momento «arropado» por su club porque «estamos en un club de Segunda B que ha demostrado ser más grande que un club de Segunda B y no creo que nos vaya a exponer. Yo tengo dos hijas y no voy a exponer a mi familia. Cuando me digan que puedo jugar, será porque podremos hacerlo sin miedo».

Cacereño, Alberto Delgado

El capitán del Cacereño, Alberto Delgado, también antepone la salud generalizada a los intereses meramente deportivos: «Lo primero es la salud y hasta que no esté garantizada no hay que tener prisas. Más vale esperar un poco más para trabajar con seguridad que precipitarse en las fechas para volver a la competición».

Delgado espera que tanto el Gobierno como la Federación puedan ayudar a los clubes con toda la logística que habrán de desplegar para evitar contagios. «Entiendo que son costes adicionales que serán muy difíciles de asumir para muchos equipos de categoría semiprofesional, por lo que espero que existan ayudas. Es necesario cumplir con todas las medidas antes de plantearse volver».

Dentro de la ya de por sí injusticia de no acabar el campeonato regular por motivos obvios, el jugador verdiblanco ve dos posibles escenarios: «Jugar un playoff sería lo más justo. Si no, existe un reglamento que dice que la competición tendría que volver a la última fecha en la que todos los equipos han jugado el mismo número de partidos». Una situación que, en el caso de la Tercera extremeña, se dio por última vez al término de la jornada 19, cuando el Cacereño era líder. «Se tome la decisión que se tome, habrá críticas y equipos disconformes», reconoce.

Respecto al estado de forma, el futbolista cántabro, que está pasando esta cuarentena en Cáceres, sostiene que será necesario realizar una especie de pretemporada: «Cuando un jugador lleva dos semanas parado pierde la forma física. Con casi un mes y medio como llevamos, mucho más. Será imprescindible realizar, como mínimo, tres semanas de preparación para volver a coger la forma y el ritmo competitivo», informa José Cepeda.

Villanovense, José Ángel

«La familia del Villanovense está unida, quiere competir y quiere lograr el ascenso por el esfuerzo que se ha hecho desde el club, la afición y los futbolistas. Que se declarara nula la competición sería un daño terrible». De este modo se expresa José Ángel, jugador referente del Villanovense que resume el sentir del vestuario ante la incertidumbre por los posibles finales de temporada.

El pacense se muestra agradecido por el trato del club serón, que define como espectacular y la plantilla está dispuesta a devolver ese buen hacer en el terreno de juego. «Los compañeros hemos decidido que, si no hay ingresos, jugaríamos sin cobrar en junio, julio o agosto, aunque tengamos que hacer un esfuerzo económico, que creo que lo tenemos que hacer como toda la sociedad», afirma. «Si el club hace un esfuerzo para pagar nuestros salarios, nosotros tenemos que devolverlo de alguna manera, no solo al Villanovense, sino también a sus socios que pierden parte de su abono», prosigue, siempre recalcando que la salud está ahora por delante de todo esto.

Terminar la temporada en el césped es una de las opciones sobre la mesa, pero no la única. Una situación que para José Ángel ha provocado la división del fútbol y su entorno. «Discuto con amigos y compañeros de profesión porque cada uno piensa diferente. También a los futbolistas se nos está señalando por ello, pero es nuestra profesión y hay que hablarlo. En estas categorías son muchos los sueldos que no llegan a 'mileuristas' y con diez mensualidades en la mayoría, pero hay mucha gente que vive de esto». Según informa Estrella Domeque, respeta sin matices las palabras de Fali: «Cada uno piensa en sus circunstancias y yo lo entiendo, porque es un momento delicado en el que cualquier cosa que digas puede afectar a otro».

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