En el Mérida creen que «aún estamos a tiempo de revertir la situación»

Y todos coinciden en lo mismo: que aún están a tiempo de todo. «Todavía queda mucho y la distancia no es insalvable», valora el director deportivo, David Rocha. «Es cierto que estamos mal, pero se puede salir de ahí porque la salvación está cerca y aún queda mucho por jugarse. Lo que tenemos que hacer es cortar la racha negativa ya este sábado y sumar de tres en tres lo antes posible. Es una situación, no para ser optimista o pesimista, sino para ser realistas». «No es una situación crítica porque quedan dos tercios de la temporada, pero sí convendría ganar ya estos dos partidos en casa, que son fundamentales, para reforzarnos y revertir la situación. Tenemos que recordarnos que somos los mismos que en las tres primeras jornadas», conviene el director general, Alejandro Pérez.

En las entrañas del club, el análisis de la situación no difiere mucho de lo que opina el entorno. «No podemos achacar la situación a un solo motivo», se explica Alejandro Pérez. «Analizándolo en frío, salvo Castellón, hemos perdido todos los partidos por la mínima. Si te entraran las ocasiones que no te entran seguramente los partidos hubieran cambiado y miraríamos la situación de otra manera. También es verdad que necesitamos corregir los errores defensivos. Por un lado está esa parte deportiva y, por otro, la psicológica, que creo que está pesando más. Y entre eso y las lesiones, nos están empujando a que la temporada, en lugar de salir mejor de lo esperado como sucedió la temporada pasada, esté saliendo peor de lo que esperábamos».

«Es verdad que no hemos mostrado un nivel futbolístico alto, pero creo que hemos hecho partidos en los últimos dos meses para ganar o al menos para sumar», opina desde su parcela David Rocha. «No estamos tan lejos de sumar o ganar partidos. Yo creo que el principal problema es mental: necesitamos ganar ya para quitarnos los fantasmas de la cabeza. Necesitamos estar más concentrados todavía porque cualquier falta de concentración nos cuesta un gol y, como estamos de ánimos como estamos, luego nos cuesta un mundo revertir la situación».

Todos en el club están trabajando desde su parcela para aportar el granito de arena necesario para solucionar la crisis deportiva. David Rocha, por ejemplo, trabajándose el mercado de invierno. «Queremos darle un margen a Manel (Ruano) para que nos dé su opinión sobre la plantilla o dónde querría o dónde necesitaríamos mejorar. Pero sí, vamos a fichar. La primera idea es completar las fichas para, cuando suframos muchas lesiones como ya ha sucedido, no nos afecte tanto como nos ha afectado. Y luego, en segundo lugar, ver en qué posiciones podemos mejorar. Aunque ya sabemos que el mercado de invierno es diferente y más complicado que el de verano».

«Sí, vamos a hacer un esfuerzo económico dentro de nuestras posibilidades en el próximo mercado para ayudar al equipo. Pero más que gastarse mucho dinero, la idea es traer los jugadores que de verdad necesitemos», explica el director general emeritense. «Lo que pasa es que no vamos a tener las mismas facilidades que en el mercado de verano. Pero la clave para ayudar al equipo está más en acertar que en gastar».

También desde su despacho del Romano virtual, es decir en la distancia, trabaja el dueño del club, Mark Heffernan. «No está cabreado, sino preocupado. Seguimos hablando mucho con él y, desde su posición, también intenta poner su granito de arena para ayudar a salir de estas», traslada David Rocha. «Mi opinión es, básicamente, también la de Mark», completa Alejandro Pérez. «Hay que seguir trabajando, confiando en ese trabajo semanal de todos y evaluar los partidos de manera fría. El club sigue su rumbo. Es sólo una crisis deportiva. En este juego sabemos que hay temporadas que pueden salir como nos está saliendo a nosotros. Podría haber sucedido lo contrario si nos hubiera sonreído la suerte en algunos partidos también».

«También digo que hay jugadores que han vivido situaciones contrarias a la nuestra: que han llegado líderes a Navidad y luego han terminado descendiendo de categoría», concluye Alejandro Pérez.