El Mérida relaja su calendario

Tras la última victoria ante el Ibiza, el Mérida se midió al Marbella a la jornada siguiente en la Costa del Sol: perdió ante un equipo que a día de hoy es cuarto en la tabla y que junta futbolistas y presupuesto para aspirar al playoff de ascenso. Fue la segunda y la última derrota del curso de los emeritenses hasta el momento. A partir de ahí aparecieron los seis empates consecutivos que hilvana.

Y esos seis empates llegaron ante el filial del Villarreal, recién descendido de Segunda A; en El Maulí frente al Antequera, por entonces líder del grupo y ahora mismo segundo en la tabla; en el Romano contra el Betis Deportivo, líder y el mejor equipo de la categoría hasta el momento por juego; ante el Alcoyano, que llegó al feudo emeritense como tercero; en Santo Domingo ante el Alcorcón, otro recién descendido de Segunda A y con equipo para aspirar al playoff de ascenso; y este último domingo contra el Ceuta, uno de los presupuestos más altos y una de las plantillas más potentes del grupo, que viene de jugar playoff la última temporada y ahora mismo ocupa la quinta plaza.

Es verdad que la igualdad que reina en el grupo en estos tres primeros meses de competición no te garantiza ningún partido fácil ningún fin de semana. De hecho, en doce jornadas se han registrado ya 98 empates, 38 más que la temporada pasada a estas alturas de campeonato (y eso que aún quedan tres partidos por disputarse que se suspendieron a causa de la catástrofe de Valencia). Pero lo que le queda al Mérida de aquí al parón de Navidad es Atlético B, Intercity, Real Madrid Castilla, Hércules, Yeclano y Fuenlabrada.

El filial rojiblanco, rival este domingo en el Cerro del Espino, está con los mismos puntos en la clasificación e iguala la racha sin perder y de empates del Mérida en el último mes y medio; el Intercity es uno de los colistas del grupo y encadena tres derrotas consecutivas; el Real Madrid Castilla marca ahora mismo la salvación; y Hércules, Yeclano y Fuenlabrada se encuentran en la mitad de la tabla.

Tras mes y medio de subir cuesta tras cuesta, al Mérida se le relaja el calendario en las próximas seis jornadas. Una causa menos para intentar salir del bache de empates consecutivos. Ahora tendrá que equilibrarlo con la recuperación de efectivos y la concentración de los pequeños detalles para volver a ganar.