El Santa Teresa cae ante el Oviedo y desciende a Segunda RFEF

Comenzó dominador el Oviedo, sin exponerse mucho, pero imponiendo su ley. Carla, que militó varios años en las filas rojiblancas, ponía varios centros al corazón del área rival y generaba mucho peligro. El Oviedo era el más incisivo en los primeros compases del encuentro, mientras que las jugadoras de Manuel Fernández esperaban su oportunidad para tratar de aprovechar los espacios. El Santa apenas era capaz de trenzar tres pases seguidos para darle fluidez al juego y buscar a Pizarro, obligada a desgastarse mucho en la presión para entorpecer la salida de balón. Lucía Vallejo afinaba la puntería en sus primeras aproximaciones y en la segunda opción que tuvo cruzó el disparo por poco. Se cumplía el primer cuarto de hora de choque y las visitantes no salían de su cueva.

Ali Pérez se empeñaba en poner calma y darle criterio al fútbol de las pacenses, pero la precipitación era la nota predominante, aunque las asturianas bajaron el pistón y los ataques se fueron secuenciando y perdiendo periodicidad. Además, las locales se mostraban vulnerables cuando les apretaban en su primera línea y ahí residía un posible filón para igualar las fuerzas. Un lanzamiento lejano y esquinado de Marín muy desviado fue lo más parecido a un tiro de las extremeñas cuando el duelo transitaba por su ecuador. Poco bagaje y demasiado temor al error. El Oviedo empezaba a ceder metros tras el empuje inicial y aunque el Santa apenas podía aprovecharlo, cogía algo de oxígeno y de vez en cuando se prodigaba desde larga distancia para probar a la guardameta rival. Fue Esperanza Pizarro la que pegó un latigazo desde tres cuartos de campo contrario, aunque muy centrado y sin entrañar mucho riesgo.

La ocasión más clara para las pacenses llegó justo al borde del descanso, cuando Esperanza Pizarro no pudo conectar bien tras un centro desde la derecha, pero la uruguaya estaba en una posición privilegiada, pero su disparo se marchó cerca del palo de Miralles.

La segunda parte se inauguró con un Santa Teresa intentando estirarse y llevar algo la iniciativa, pero los nervios atenazaban a los dos conjuntos y el fútbol brillaba por su ausencia. Juego directo, abuso del balón aéreo, muchas interrupciones, continuas faltas, dudas y sin nadie que diera un puñetazo en la mesa para desnivelar la balanza.

Laura estaba muy desconectada, casi inédita en el choque y hasta el minuto 53 apenas tuvo incidencia en el juego. En ese momento la futbolista catalana se internó por el flanco derecho, pero su centro, muy pasado, no encontró rematadora. Una acción parecida en el otro área a punto estuvo de significar el primero de las bermellonas, que llegaría pocos después con un gran remate de Yamila, que establecía el 1-0 en el minuto 61. En el 73, Yarima Font ponía la sentencia tras una contra que finalizó con una vaselina a la salida de Ana de Murga.