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Marco A. Rodríguez
Badajoz
Martes, 12 de diciembre 2023, 20:52
Dicen que no cuesta nada hacer feliz a un niño. En el caso de Hugo, el esfuerzo de la Peña Blanquinegra Guzmán Casaseca y la dedicación de un CD Badajoz que demuestra tener alma con estas acciones. Hugo, un niño jienense de nueve años que padece autismo, vivió un fin se semana que quedará grabado para siempre en su retina. Sus ojos y su cara de asombro le delatan en la visita al equipo blanquinegro de un pequeño que nada tiene que ver con el club pacense, convertido –junto con el deporte rey– en tabla de salvación para los negativos efectos de su discapacidad sobre la interacción social. Sus padres, Ana y Santiago, que viven en Andújar y ni siquiera son extremeños, batallan en la trinchera por una causa justa: que su hijo pueda jugar al fútbol, ya que no hay equipos o ligas inclusivas para estos niños en su tierra y se le niega una actividad que, encima, le conviene.
El CD Badajoz era un verdadero extraño para Hugo y familia. El primer contacto del chico con el equipo tuvo lugar casi por accidente, en la boda de su tío en Jaén. Allí conoció al exblanquinegro Edu Sánchez y coincidió con uno de los miembros de la Peña Guzmán Casaseca, que le habló del Badajoz. Todo un flechazo para Hugo, que se enamoró perdidamente del club del Nuevo Vivero. No paró de investigarlo, se aprendió el himno, vio numerosos vídeos y elevó a un pedestal al excapitán, su auténtico ídolo y un jugador que ha dejado huella por su desempeño tanto dentro como fuera del campo.
La mencionada peña se puso manos a la obra y crearon el hastag#ElSueñoDeHugoJienenseCDBPBYNGCL7 con la intención de organizar una visita. Y el resultado se hizo visible el pasado fin de semana, cuando, acompañado de sus progenitores, el niño estuvo en el entrenamiento del sábado, hizo algo así como un tour por el Nuevo Vivero con rueda de prensa incluida simulando su fichaje. Hasta tiró penaltis a los arqueros y el domingo asistió al derbi ante el Montijo.
«Nuestro peñista nos informó de su caso y de que no le dejaban jugar al fútbol y muy pronto nos movimos, con la colaboración de Guzmán, que siempre se ha volcado con nosotros. Había que traerlo a Badajoz y que conociera el club. Buena parte de las personas de esta peña somos personas con discapacidad y pensamos que había que hacer algo para ayudar a un niño que también es discapacitado. Queríamos darle visibilidad y que él cumpla su sueño, porque es su pasión», explica Luis Miguel de la Concepción García, presidente de la Peña Blanquinegra Guzmán Casaseca.
«El niño todo lo hace vinculado al fútbol, es la única forma que tiene de aprender y de relacionarse. Es muy gracioso porque se conoce todo de los jugadores. Cuando se le acercó Carlos Cordero ya sabía que era él, y a los demás los conocía y a todos les decía algo. Era alucinante», continúa 'Luismi' antes de señalar que Hugo ha sido nombrado 'miembro de honor' de la peña.
Ana Cortés es la madre de Hugo y solo tiene palabras de agradecimiento respecto a la experiencia de su vástago. «Ha sido sin duda el fin de semana más feliz de su vida. Una resaca emocional, porque no esperábamos tanto del Badajoz, de Guzmán, la peña.., todos. Muy emocionante. Él nunca había pisado un estadio, fue la primera vez que pisaba el césped», recuerda conmovida.
Ana confiesa que toda la vida de Hugo, que precisamente cumplía los nueve años el domingo, gira en torno al fútbol. «Él no puede mantener una conversación que no sea de fútbol, solo cuando le hablas de fútbol interviene. Es su centro de atención. Siempre recula ante los extraños. Por eso cuando le vimos hablar con los jugadores fue una pasada y hasta les chocó la mano como si les conociera de toda la vida».
Ana y su marido Santiago tropiezan contra un muro cuando intentan enrolarlo en algún equipo. Solo reciben negativas de los clubes, la federación o la concejalía de Deportes. Bien por su aprendizaje diferente, porque utiliza pañal, porque no soporta los ruidos –por eso en las imágenes se observa que lleva unos cascos–, etc. «Cada autista tiene un centro de interés y el suyo es el fútbol. Le das un balón y se olvida de todo y es la única forma de llegar hasta él. Es la única forma de normalizarlo.
Ana Cortés
Madre de Hugo
Podría estar ante mil personas y no se asustaría, pero si en casa pongo la batidora pasa miedo», sigue Ana, que creó una cuenta de Instagram sobre la lucha de su hijo a la que Lamine Yamal dedicó un vídeo.
Los padres lamentan que apenas haya equipos inclusivos en Jaén, por ejemplo en Andújar, con más de 36.000 habitantes sin contar las pedanías. El deporte le vendría bien pues, además de proporcionarle felicidad, padece hiperlaxitud articular, es decir, que tiene las articulaciones demasiado flexibles. «Hay más casos, pero las administraciones se lavan las manos porque solo son números. La palabra inclusión no existe, solo es propaganda y al final los niños como Hugo son grandes olvidados».
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