M. Gª Garrido
Badajoz
Jueves, 6 de febrero 2025, 21:31
La idea que manejaba Luis Oliver Sierra antes de viajar a Llerena pasaba por iniciar en ese encuentro una mutación controlada de su esquema táctico. Mantendría el predominante en las últimas jornadas durante la primera parte, para introducir las pinceladas en el dibujo ... que adquirirá preponderancia a corto y medio plazo. Hasta la fecha se había consolidado el 4-2-3-1 con dos hombres de mucho trabajo y que abarquen campo en la medular, que se mantendrán (aunque Fran Miranda será baja por sanción este domingo ante el Diocesano), otros dos con desborde y calidad en las bandas, un enganche en la media punta y una referencia arriba como nueve.
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Esa figura de escudero del ariete perderá presencia para el preparador del Badajoz, porque ya advirtió en la víspera del choque del pasado sábado que ese sistema «pasará a mejor vida, teniendo cuatro delanteros hay que salir con dos», manifestaba sin conato de duda sobre una cuestión que suponía prácticamente una obviedad. Sobre todo tras la llegada de Borja Domingo como competencia de Álex Alegría, el recién llegado David Grande y Montori.
En el Fernando Robina la puesta en escena conservó su planteamiento de cabecera más reciente, pero Oliver Sierra reconoció que tenía previsto que mutara de manera innegociable tras el paso por vestuarios, tal y como desveló el técnico aragonés durante su comparecencia de prensa posterior a la derrota en la Campiña Sur. El guion se torció con la expulsión de Fran Miranda, pero continuó con su hoja de ruta y puso en liza una táctica que oposita a imperante en las próximas alineaciones. «Yo tenía previsto pasar al 4-4-2 en la segunda mitad pasara lo que pasara, más aún perdiendo, pero al final ha sido un 4-3-2, no íbamos a dar un paso atrás».
Con Borja Domingo ya integrado en el grupo e inscrito desde el pasado lunes, teniendo en cuenta las dificultades de cara a la portería rival de los pacenses, gana enteros la posibilidad de que tome la alternativa para dar estabilidad a la disposición con dos puntas.
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Este jueves se conoció la resolución de otro de los frentes judiciales que mantiene abiertos el Badajoz, en este caso el concerniente a las nóminas que la entidad blanquinegra adeudaba a su plantilla de la Academia de la pasada temporada.
Según pudo saber este diario, los jugadores del filial han llegado a un acuerdo antes de la celebración del juicio. En virtud a ello, recibirán cantidades muy cercanas a las que se les debían. Una situación por la que lanzaron la voz de alarma en abril de 2024 al acumular más de tres meses de retrasos, una coyuntura que, lejos de resolverse, se enquistó y desembocó en la posterior denuncia.
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