Borrar
Álvaro Martín celebra el oro europeo camino de la meta en solitario. :: efe
Álvaro Martín : «No hay que bajar la guardia»

Álvaro Martín : «No hay que bajar la guardia»

Campeón de Europa de 20 kilómetros marcha ·

«Tengo unas ganas tremendas de ir a casa y pisar Llerena, descansar y celebrarlo con mi familia, mi pareja y mis amigos»

Javi Pérez

Badajoz

Lunes, 13 de agosto 2018, 08:32

Álvaro Martín dejó grabado con letras de oro su nombre en el muro de Berlín. Un título para la historia del deporte extremeño. Sabía que su momento había llegado. Era cuestión de tiempo reivindicarse en una gran cita. Este domingo acudía al estadio Olímpico como campeón de Europa para disfrutar ya relajado de la última jornada. Una estrella en la grada. No le hicieron pasillo ni pusieron alfombras rojas, pero con el llerenense no hace falta. Siempre humilde, comprometido con su tierra, con gran concienciación social y las ideas claras no se olvida de sus orígenes y mira a un futuro brillante con los pies en el suelo.

-¿A qué sabe el oro?

-A la alegría de saber que he competido bastante bien, había entrenado muy, muy, muy bien. Sabía que llegaba en un gran estado de forma y poder plasmarlo en competición. Luego ya independientemente del título pues es una alegría de saber que he hecho bien los deberes y que se han plasmado en el día del examen..

«Lugano va a seguir siendo uno de los momentos más emotivos de mi carrera»

-¿En qué pensaba durante ese último kilómetro mientras saluda al público camino hacia la gloria?

-Es una competición muy dura poraque había grandes rivales. Me pude distanciar en el kilómetro 18 y el último me lo dedique para mí, para disfrutarlo y por toda la gente que había venido a verme poder darle las gracias por estar ahí. La competición es muy dura y poder darte el lujo de disfrutar el último kilómetro aflojando un poquito, darte ese gustazo porque pocas veces voy a poder disfrutar un último kilómetro así en una gran competición.

¿Qué es lo primero que se le vino a la cabeza?

-Que ha sido una temporada dura, muy difícil, donde he conseguido ser lo más regular deportivamente. La alegría y satisfacción de haber dado ese gran salto que tanta gente me llevaba pidiendo de un gran campeonato estar ahí en un podio. Independientemente de eso sé que tengo una responsabilidad y no soy ajejo a lo que van diciendo, pero también me aíslo y quiero hacerlo bien por mí mismo. Poder plasmarlo para que todo el mundo estuviesecontento y la satisfacción de haber cumplido de la mejor manera posible.

-¿Es consciente de la gesta que ha conseguido?

-Creo que voy a ser consciente cuando ya me vaya a casa y ya descanse totalmente tranquilo de vacaciones en mi pueblo. Poco a poco intentaré asimilar este grandísimo triunfo. Tampoco me perocupa venirme arriba por ser campeón de Europa porque hay grandes objetivos. La temorada que viene se presenta bastante emocionante y no hay que bajar la guardia. Hay que seguir intentando entrenar de la mejor manera posible y plasmarlo en la competición.

-Se lleva una portada de oro. Nada menos que el mayor éxito del atletismo para Extremadura.

-Hemos tenido grandísimos deportistas y atletas extremeños. Hemos competido Javi Cienfuegos, Tania Carretero y yo y ojalá hubiera podido hacerlo Teresa Urbina. Qué mejor manera que en un momento dado en un gran campeonato un atleta extremeño pudiera hacer algo grande. Espero no ser el único y en los próximos campeonatos seamos más extremeños los que podamos competir y por supuesto no ser el único que pueda hacer grandes cosas. Esperemos que haya más portadas así, no sólo mía, sino de otros deportistas extremeños.

-De todas las felicitaciones recibidas, ¿cuál ha sido la más especial?

-La verdd es que ha habido varias felicitaciones que me han llamado mucho la atención. Me han felicitado el presidente del Gobierno Pedro Sánchez, Pablo Casado, Albert Rivera, el cantante y paisano Hueco y también el presidente de Extremadura Fernández Vara. Las felicitaciones están bien porque todo el mundo se acuerda de ti el día que lo haces bien. No quiero remarcar ninguna en especial porque me han dado a entender que se han hecho eco de la hazaña que hicimos

¿Cómo será el recibimiento en Llerena? ¿Le han comentado algo?

-Espero que sea de lo más tranquilo posible (ríe). Ahora quiero descansar, celebrarlo en Llerena con mi familia, con mi pareja, mis amigos. Quiero que sea lo más tranquilo y lo más natural posible porque si algo quiero intentar demostrar en mi pueblo es que no soy superior a ninguno de los llerenenses que están allí y si hay un deportista extremeño que ha salido de Llerena pueden salir más. Les daría las gracias si tienen preparado algo, pero si no lo tienen no me importaría lo más mínimo.

-Llegaba a Berlín con muy buenas sensaciones y confiando en sus posibilidades. ¿Entraba el título entre su objetivo?

-No tenía pensado ningún resultado que pudiese hacer. Lo único que iba pensando y así lo quise dejar claro en las entrevistas previas era que yo quería sacar mi máximo rendimiento porque había entrenado bien y manejaba mis variables. No sabía cómo estaban los demás y si a lo mejor ganaba el alemán pues quitarme el sombrero si quedaba segundo si había dado lo máximo de mí.

«Nunca seré capaz de agradecer a Juan Méndez haberme educado y hacerme entender los valores del deporte»

-¿Ha sido más sorpresa que cuando irrumpió con 17 años en Lugano con la mínima olímpica?

-Aquí ya tenía una madurez deportiva y lo que pudiésemos realizar lo veíamos como previsible o factible. Lo de Lugano en ningún momento se me pasó por la cabeza porque era un niño muy pequeño. Creo que Lugano va a seguir siendo uno de los momentos más emotivos de mi carrera por esa inexperencia y por ese día tan especial que se me va a recordar para el resto de mi vida.

-Había sido bronce en la Copa de Europa, sexto en el último Europeo de Zurich y octavo en el Mundial de Londres. Era cuestión de tiempo reivindicarse en una gran cita.

-Soy todavía joven, tengo solo 24 años recién cumplidos. Tenía que tener la sangre fría en los grandes campeonatos, pero era mi momento. En campeonatos anteriores me he quedado bastante cerca y creo que ya tocaba. Aún así cada campeonato es un mundo.

-Con 24 años es muy joven, ¿cuántos éxitos le quedan por celebrar?

-Es algo impredecible en teoría. Pero la madurez se alcanza a los 27 años, así que esperemos que tenga cuerda para rato. Me encuentro con muchas ganas y motivado y espero seguir dando batalla por muchos año.

-¿Se ve como García Bragado?

-Es un caso excepcional y creo que nadie se puede acercar. Personalmente yo no me veo compitiendo con 49 años porque mis motivaciones serán diferentes y no tendré esa dedicación que tengo ahora mismo con el atletismo.

-En los Juegos se llevó dos sinsabores a pesar de que en Londres debutaba con 18 años recién cumplidos y en Río acabó en el puesto 22. ¿El oro europeo colma su decepción personal en los Juegos o aún tiene esa espinita olímpica clavada?

-Me queda bordarlo en un gran campeonato como los Juegos Olímpicos. Es la competición máxima y es donde un gran resultado marca la historia y lo más notable del palmarés de un deportista. Si me clasifico para Tokio espero que sea una situación diferente. Me quedo con la sensación de no pensar en el pasado y pensar en el futuro con la confianza y esperanza de conseguir grandes registros antes de Tokio.

-¿Se imaginaba cuando tuvo que dejar el fondo por una lesión para probar con la marcha que llegaría tan lejos?

-No porque al final dedicarse al atletismo profesional y de élite es una decisión que tomé con 16 años al querer entrar en la Blume. En el momento de la lesión tenía 13 años y el atletismo era como un hobby, un estilo de vida saludable, que a mis padres le gustaba y yo disfrutaba.

-¿Qué significa la figura de Juan Méndez?

-Ha sido un padre para mí porque siempre ha estado ahí desde muy pequeñito. Aparte de entrenarme me ha educado como persona a la hora de hacerme entender que hay valores en el deporte que se pueden transmitir en la vida personal. Nunca seré capaz de agradecérselo. Para mí fue una alegría cuando me fui a la Blume que él con toda su humildad me deseara lo mejor. Por eso estos éxitos tienen su pedacito para él porque se alegra muchísimo.

-Nada más colgarse la medalla tuvo un gesto muy emotivo. ¿Qué le dijo?

-Le envíe un whatsapp diciéndole que un pedacito de esa medalla le pertenecía a él porque me había sacado y siempre está detrás de mí en las competiciones nacionales e internacionales. Darle las gracias porque sigue sacando marchadores en la región y con la esperanza que algún día saque otros marchadores que puedan realizar gestas como la mía e incluso mayores.

-Un grupo de marchadores en la Campiña Sur que empiezan a pisar fuerte en la base con Ana Pulgarín, José Manuel Naranjo, Laura Sanabria, Manuel Monterrubio... El 'abuelo' Méndez siembra las semillas del futuro.

-Es una alegría saber que dentro del atletismo español se tenga a Extremadura como un referente en la cantera de la marcha atlética. Para mí es increíble y que se nombre a los pueblos de la Campiña se lo debemos a Juan Méndez.

-Este año acumula un título tras otro, incluido el universitario en Ciencias Políticas. ¿Cómo lo hace?

-Porque para mí es un orgullo poder estudiar. Hasta no hace mucho era algo privilegiado. A mí personalmente me gusta mucho la carrera que he estudiado. Ahora que he terminado Ciencias Políticas voy a empezar con Derecho porque creo que complementa muy bien pensando en un futuro en las salidas laborales, que está bastante complicado, para estar formado de la mejor manera posible.

-¿Y dónde se ve en ese futuro fuera de las pistas?

-Me gustan mucho los temas que tienen que ver con las resoluciones de conflictos internacionales. Intentar paliar un conflicto me parece que es la mejor manera de aplicar la ciencia política. Por desgracia nuestro mundo está lleno de conflictos y es algo inevitable por el mismo comportamiento del ser humano. Para eso hay que formarse y por supuesto hay que tener idiomas, que es lo que me hace falta. El siguiente paso cuando termine Derecho es aprender varios idiomas.

-Pone broche de oro a una temporada de ensueño con el oro en el Europeo y dos campeonatos de España, pero antes comentaba que había sido su año más duro. ¿Se ha exigido mucho?

-

Ha sido un año muy duro por unas cuestiones federativas que hemos podido solventarlas. En diciembre no sabía ni siquiera si podía disputar este Campeonato de Europa. Al final todo se ha resuelto a mi favor. Muy contento por cerrar la temporada y con unas ganas tremendas de ir a casa en Llerena, estar de vacaciones con mi gente y desconectar del atletismo.

.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

hoy Álvaro Martín : «No hay que bajar la guardia»