Celestino J. Vinagre
Miércoles, 18 de marzo 2015, 08:04
mérida. El misionero extremeño se salvó del ciclón. Antonio López García-Nieto, religioso de la orden de los Hermanos del Sagrado Corazón (corazonistas) del que no se tenía noticias desde el fin de semana, se encuentra a salvo en Vanuatu, archipiélago del Pacífico Sur a 1.750 kilómetros de Australia. El religioso, de 55 años y natural de Don Benito, se ha podido comunicar con otros hermanos de su orden en Oceanía para confirmarles que está bien y que no se vio afectado por el ciclón Pam, que azotó el pasado fin de semana ese país del Pacífico Sur y causó al menos once muertos y desplazó a un 70% de la población.
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«Antonio nunca ha estado desaparecido, sino que hemos estado varios días sin noticias de él. Afortunadamente está bien aunque no haya podido contactar con él, algo muy complicado a corto plazo», explicó ayer a HOY Eusebio Calvo, Provincial Superior de los hermanos corazonistas en España.
Calvo agregó que se han enterado del estado de Antonio López a través del Vaticano. «No sé quién, alguien de Vanuatu, llamó al provincial de Oceanía, éste llamó a Roma, y Roma, el martes por la noche, nos avisó a nosotros», agregó. Junto al misionero español no se tenían noticias de otros dos religiosos de ese archipiélago y otro canadiense. Igualmente no sufrieron daños.
La congregación de los corazonistas se fundó en la ciudad francesa de Lyon en 1821. Están en 33 países. Su misión principal es la educación.
El dombenitense Antonio López trabaja desde 2001 junto a otros hermanos corazonistas en la sureña y remota isla de Tanna, la que estuvo más cerca del centro del ciclón Pam. El misionero extremeño es licenciado en Filología Francesa y en Ciencias Catequéticas.
Su superior en España lo define como una persona «muy colaboradora y cercana a la gente necesitada. Me quedo con algo que suele repetir: ser misionero no es un camino de rosas, pero sí que es un camino alegre». Calvo enfatiza que «Antonio es una persona cercana, vitalista, dispuesto a ayudar. Cumple muy bien con el dicho popular de si necesitas algo urgente, pídeselo a una persona ocupada y lo conseguirás. Así es Antonio. Vive contento y alegre entre su gente de su patria adoptiva, Vanuatu».
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En ese archipiélago de Oceanía el sacerdote de Don Benito enseña en los cursos superiores y además realiza labores sanitarias en la localidad de Lowanatom.
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