Cuatro detenidos por la muerte de un guardia civil en Don Benito

Juan Francisco Lozano Díaz, de 50 años, padre de un hijo y una hija, solía ir por Don Benito, su localidad natal, cuando su trabajo se lo permitía. Era un guardia civil con destino en el cuartel del municipio guipuzcoano de Zarauz, donde llevaba ocho años. Con unos días libres, decidió pasar el puente de Todos los Santos en Extremadura. Ayer de madrugada, poco después de las dos de la noche, perdió la vida cuando intentó ayudar estando fuera de servicio. Fue acuchillado en el exterior del pub, Boston, en la céntrica plaza de España dombenitense. Le estaban esperando. Minutos antes, el agente había mediado en un trifulca que se originó dentro del local de copas.

Cuatro personas, tres de ellos hermanos, están acusadas de participar en un suceso trágico que conmocionó otra vez a Don Benito. La información aportada por la Delegación del Gobierno en Extremadura indica que tres de los detenidos fueron los que agredieron con un arma blanca al agente en la calle.

Esos tres serían presuntamente los hermanos F. G. L, A. G. L. y O. G. L, residentes en Don Benito aunque oriundos de otro municipio de las Vegas Altas. Los tres, entre 20 y 30 años de edad, huyeron tras producirse la agresión mortal pero poco antes de la dos de la tarde se entregaron a la Policía Nacional.

El cuarto detenido estuvo declarando inicialmente como testigo en la Comisaría dombenitense, pero horas después se informó a los medios de comunicación que pasaba de ser testigo a imputado en el crimen, aunque no se conoce todavía el grado exacto de implicación.

Lo que se ha confirmado es que el agente recibió al menos dos puñaladas, concretamente en el cuello y en el costado, según explicó el portavoz de la Policía Nacional en Extremadura, Manuel Moreno. Ayer por la mañana se le realizó la autopsia en Badajoz.

Juan Francisco Lozano había estado durante varios años en el cuartel de Don Benito. Llevaba 25 años en la Benemérita. Desde hace ocho estaba en Zarauz. Contaba con dos hijos fruto de su relación con su ya expareja, una agente de la Guardia Civil que trabaja en Chiclana (Cádiz).

Lozano estaba este puente festivo de Todos los Santos en su localidad natal. Por la noche acudió al conocido pub Boston, que se reabría después de cinco años cerrado. Poco antes de las dos de la madrugada se produjo una discusión entre un grupo de personas. En esa bronca dialéctica intervenían los hermanos ahora detenidos. El guardia civil y estos no se conocían, según fuentes de la investigación.

Para evitar que la discusión fuera a más, el agente intentó calmar los ánimos. Medió. Y, aunque no estaba de servicio, se identificó como guardia civil. Cesó la bronca en el pub Boston. Minutos después, los presuntos agresores salieron del local. También lo hizo Juan Francisco Lozano.

Fue acuchillado y, tras resultar herido, según ha podido conocer este diario, fue el propio guardia civil quien cogió su teléfono móvil y llamó al centro de urgencias y emergencias 112 para ser atendido. Al poco tiempo se presentó una ambulancia medicalizada. Se le realizó la reanimación cardiopulmonar durante una hora aproximadamente pero no se pudo salvar su vida. El equipo médico certificó su fallecimiento en la plaza de España.

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La Policía Nacional consiguió obtener las identidades de los presuntos implicados en el acuchillamiento. Los tres hermanos (F. G. L, A. G. L. y O. G). L abandonaron el lugar en un coche, un BMW X6 blanco, que enseguida empezó a ser buscado. Los tres no llegaron a salir del municipio. Se fueron a un chalé de su propiedad. La Policía, en contacto con su abogado, les convenció para que se pusieran a disposición policial.

Mientras, la cuarta persona que está detenida por la muerte no huyó y se personó en las dependencias policiales para declarar, inicialmente, como testigo.

La Delegación del Gobierno destacó que las detenciones se produjeron «tras intensas gestiones realizadas por la Policía Nacional, encabezadas por el comisario provincial de Badajoz, Juan María Cervera», quien habló con el letrado de los ahora detenidos.

Al cierre de esta edición, anoche seguían declarando en Comisaría para realizar el atestado para ser puestos posteriormente a disposición del juez. Es muy posible que eso ocurra a lo largo de hoy.

El funeral por Juan Francisco Lozano Díaz se celebra esta mañana, a las once, en la iglesia de Santiago. Ayer su cuerpo fue velado en el tanatorio Tanesa de la localidad dombenitense.

Ayer, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, transmitió su cariño a la familia y compañeros del guardia civil Juan Francisco Lozano Díaz. En su cuenta de Twitter, Sánchez indicó que los guardias civiles «son ejemplo de compromiso, vocación y entrega, muchas veces más allá de lo exigible». El jefe del Ejecutivo central trasladó su abrazo y su cariño a la familia y los compañeros del agente «asesinado en Don Benito cuando, libre de servicio, trataba de mediar en una discusión».

En Extremadura, el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, se sumó también al pésame a través de las redes sociales. «Siempre velando por los demás, fieles a su deber. Mi más sincero pésame a la familia de Juan Francisco Lozano Díaz y a todo el cuerpo de la Guardia Civil», escribió el presidente extremeño en Twitter. Las muestras de condolencia se sucedieron durante toda la jornada de ayer.

El Ayuntamiento de Don Benito ha declarado dos días de luto oficial en el municipio por la muerte del guardia civil.