«Espero devolver a Mérida todo lo que me ha dado»

mérida. 'Decencia, compromiso, ilusión y trabajo'. Es la frase que tiene en su perfil de Whatsapp junto a una foto suya. Una imagen con la que ha dado a conocer, más si cabe, su candidatura por el PSOE a la Alcaldía de Mérida. Es Antonio Rodríguez Osuna. Alcalde de la capital de Extremadura para la próxima legislatura, la segunda con el bastón de mando.

Nacido en Mérida hace 44 años, casado con Eva, tiene maestría en Administración y Dirección de Empresas; MBA Executive por la Escuela de Negocios ITAE y diplomado en Educación Física, en la Facultad de Educación de Badajoz, por la Universidad de Extremadura.

Ha ejercido como empresario en el sector de la hostelería. Miembro del PSOE, fue concejal del Ayuntamiento de Mérida entre 1999 y 2004. Posteriormente fue asesor del vicepresidente de la Junta de Extremadura. Jefe de gabinete en la Consejería de Industria y Medio Ambiente de la Junta entre 2007 y 2011, año en el que pasa a ocupar un escaño en la Asamblea de Extremadura. Fue portavoz del grupo parlamentario socialista en la comisión de Energía, Medio Ambiente y Deportes.

En octubre de 2014 fue proclamado candidato del PSOE a la Alcaldía de Mérida para las elecciones municipales del 24 de mayo de 2015, fecha en la que es elegido alcalde y que ha revalidado en los comicios del pasado 26 de mayo con mayoría absoluta y un equipo de 14 ediles.

Amante del baloncesto, y en lo futbolístico del Mérida AD primero, y del Atlético de Madrid después, es abonado de ambos equipos.

Apasionado de todas las fiestas de su ciudad, sin duda el Carnaval es una de sus pasiones, con especial predilección por el de Cádiz.

Espera que pronto haya buenas noticias sobre la Azucarera y que esta sea «el nuevo motor de desarrollo y de actividad económica que vuelva a recuperar la Mérida de los 70, pero con los avances tecnológicos y nuevos derechos del siglo XXI».

Y, entre otras cosas, sueña con la gran plaza de la Basílica de Santa Eulalia y la integración del convento de Las Freylas.

Cuando le preguntan por los ocho años en la Alcaldía, asegura que lo tiene muy claro. «Es mi última legislatura y espero devolver a Mérida todo lo que la ciudad que amo me ha dado».